Una ola de calor abrasador ha azotado a Canadá y parte de Estados Unidos esta semana, provocando temperaturas máximas de casi 50ºC.
Cientos de personas han muerto a causa del calor, que también ha provocado incendios.
Esto es lo que sabemos sobre lo que está sucediendo.
¿Qué tan grave es?
La ola de calor ha batido récords de temperatura en todo el oeste de Canadá y el noroeste del Pacífico de EE.UU.
Canadá rompió el martes el récord de temperatura más alta registrada del país: 49,6ºC en el pueblo de Lytton, en la Columbia Británica.
Un incendio forestal ha quemado el 90% de Lytton y ha dañado la infraestructura crítica, de acuerdo a funcionarios locales.
Antes del domingo, las temperaturas en el país nunca habían sobrepasado los 45ºC.
Se ha culpado al calor de provocar la muerte de cientos de personas en la región.
Mientras, en el noroeste de EE.UU. también se han registrado máximas históricas y varias muertes.
Portland, una ciudad conocida por su clima lluvioso, rompió su récord de temperatura más alta de todos los tiempos durante tres días seguidos.
La temperatura en el Aeropuerto Internacional de Portland alcanzó un máximo de 46,1ºC el lunes, por encima del máximo del día anterior de 44,4ºC y de los 42,2ºC del sábado, según el Servicio Meteorológico Nacional de EE.UU.
Se cree que decenas de muertes en los estados de Washington y Oregón están relacionadas con la ola de calor.
¿Cómo se ha visto afectada la gente?
Las temperaturas abrasadoras han dejado a muchas personas vulnerables luchando contra el calor sofocante.
El clima de la región es típicamente templado y muchos hogares no tienen aire acondicionado, lo que podría ayudar a explicar el aumento repentino de las muertes.
Muchos se han visto obligados a refugiarse en centros de refrigeración y edificios con aire acondicionado, como estadios, donde los vecinos pueden trabajar y dormir.
Las personas e infraestructuras en los espacios urbanos, que absorben más calor que las áreas rurales más verdes, se han visto particularmente afectadas por las altas temperaturas.
El calor ha sido tan intenso que ha derretido los cables eléctricos y doblado las carreteras.
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En Vancouver, Canadá, los residentes aseguraron que las ventanas de los automóviles se agrietaron y derritieron, incluso cuando no estaban estacionados al sol.
Los centros de vacunación se vieron obligados a cerrar o reubicarse, las escuelas cerraron sus puertas y se suspendió parte del transporte público, incluido el servicio de tranvía de Portland.
En otros lugares, las tiendas se quedaron sin aires acondicionado portátiles, ventiladores, hielo y agua.
Ahora se teme que se produzcan más incendios forestales devastadores, como el observado en Lytton, en la Columbia Británica.
¿Cuál es la causa?
Las altas temperaturas persistentes son el resultado de lo que se conoce como un "domo de calor", una masa de aire caliente que presiona hacia abajo sobre un área enorme.
A medida que el aire caliente intenta subir, este sistema de alta presión empuja el aire caliente hacia la superficie y se vuelve más denso y más caliente a medida que se comprime.
Los expertos dicen que se espera que el cambio climático aumente la frecuencia de eventos climáticos extremos, como las olas de calor. Sin embargo, es complicado vincular un solo evento con el cambio climático.
¿Cuánto tiempo va a durar?
Las temperaturas han bajado en las zonas costeras de Canadá y el noroeste de EE.UU., pero no ha habido mucho respiro para quienes viven en las regiones del interior.
El sistema meteorológico se está moviendo ahora hacia el este, sobre las praderas canadienses: Alberta, Saskatchewan y partes de Manitoba están ahora bajo advertencias de calor.
¿Cómo puedo mantenerme fresco durante una ola de calor?
Debe refrescarse inmediatamente si presenta los siguientes síntomas: dolores de cabeza, sensación de mareo, pérdida de apetito, náuseas, sudoración excesiva, calambres, respiración acelerada y sed intensa.
Si la temperatura del cuerpo alcanza los 40ºC, puede producirse un golpe de calor, lo que requiere ayuda médica urgente. Los signos de peligro incluyen la sudoración detenida (la persona puede sentirse caliente pero seca) y dificultades para respirar.
