A principios de esta semana, después de los fuertes vientos causados por la tormenta Dennis en Reino Unido y el oeste de Europa, un buque "fantasma" de carga apareció en la costa del condado de Cork, Irlanda.
Imágenes aéreas de la Guardia Costera Irlandesa muestran el enorme buque de 80 metros de eslora encallado cerca de la localidad pesquera de Ballycotton.
Y ahora, los fotógrafos pueden visitar y tomar imágenes de este gigante acostado sobre las rocas de la costa.
La embarcación estuvo a la deriva por casi un año y medio, tiempo en el que ha cruzado miles de millas por el océano Atlántico después de haber sido tripulado por última vez en 2018 cerca de la isla de Bermuda.
La Guardia Costera de EE.UU. rescató a la tripulación en septiembre de 2018.
"Esto solo ocurre una vez en un millón", dijo John Tattan, uno de los guardias marítimos de la zona.
Construido en 1976, el barco, que lleva el nombre Alta y la bandera de Tanzania, tuvo antes otros varios nombres y dueños.
En septiembre de 2018 tuvo problemas en su viaje desde Grecia hacia Haití.
Una falla en el suministro de energía dejó a la embarcación a la deriva cerca de la isla de Bermuda por unos 20 días. Y mientras sus diez tripulantes intentaban arreglar la falla, un huracán que se acercaba a la zona obligó a la Guardia Costera estadounidense a evacuar a todos del buque.
Desde entonces, el barco quedó abandonado. La última vez que había sido visto fue en septiembre de 2019, en mitad del océano Atlántico y por un barco de la Marina real británica.
Esta semana, los visitantes curiosos pudieron abordar el buque encallado cerca del condado de Cork.
Hasta ahora no se han registrado filtraciones de sustancias contaminantes del barco, de acuerdo a organismos ambientales de la localidad de Ballycotton.
El futuro de la embarcación será decidido por el Concejo del condado de Cork.
De acuerdo al diario Irish Times, una persona que declaró ser representante del dueño del buque se presentó a reclamar la propiedad sobre los restos.