Pocos en la nación zulú esperaban que la reina Mantfombi Dlamini-Zulu muriera de repente.
Pero así sucedió la semana pasada y este viernes fue enterrada en una ceremonia privada en el palacio real de Kwangelamankenganel, en la provincia sudafricana de KwaZulu-Natal, dejando a los 11 millones de zulúes preguntándose quién la sucederá en el trono.
El repentino deceso de la reina Diamini, de 65 años, ha desatado una disputa sucesoria de desenlace incierto y rumores de que pudo ser envenenada.
Había sido designada regente de los zulúes en marzo tras morir su marido, el rey Goodwill Zwelithini, que dejó 6 esposas y al menos 26 hijos.
Aunque el rey zulú ya no ostenta poder político en Sudáfrica, la monarquía conserva una gran influencia gracias a su liderazgo simbólico y espiritual entre los zulúes, el grupo étnico más numeroso del país. La corona recibe un presupuesto anual de US$4.9 millones del Estado sudafricano.
El adiós a la reina
La familia de la reina regente ha rechazado los rumores de que pudo haber sido envenenada, pero las causas de su muerte aún no se han hecho públicas.
Su primogénito, el príncipe Misizulu, considerado por muchos el mejor situado para sucederla en el trono y convertirse en el próximo rey zulú, hizo un llamamiento a la unidad en un discurso en el que recordó la figura de su padre.
"Emulemos al rey siendo pacíficos y sigamos amando a todas las reinas", pidió Misizulu en el funeral de su madre, según el medio local TimesLives.
A la despedida de la reina acudió, entre otros, el presidente sudafricano Jacob Zuma, quien siempre ha reivindicado su origen zulú.
La decisión sobre quién será el nuevo rey de los zulúes aún no ha sido tomada.
El difunto rey Goodwill Zwelithini, que falleció de complicaciones derivadas de la diabetes a los 72 años, después de 50 en el trono, eligió como regente a Mantfombi Dlamini-Zulu porque era la única de sus esposas que tenía sangre real.
De acuerdo con la tradición, debía ejercer la regencia durante tres meses y finalmente anunciar el nombre del nuevo rey, pero murió antes de hacerlo, lo que ha alimentado las especulaciones sobre las causas de su muerte.
Diamini era la hermana de Mswati III, rey de Suazilandia, y se casó con Goodwill en 1977, con el que tuvo 8 hijos.
Venir de la realeza le aseguró la condición de "Gran Esposa" entre el resto de mujeres del rey y se cree que se disponía a usar esa prerrogativa para designar como nuevo rey a su hijo Misizulu, de 46 años y educado en Estados Unidos.
Pieles de leopardo y guardias armados en el funeral
Por Nomsa Maseko, BBC News Africa
Cientos de personas se reunieron en la despedida a la reina Diamini, entre ellas muchas de las doncellas a las que tenía al cargo.
Los asistentes compartían, entre nostálgicos y sombríos, comentarios sobre su figura.
Allí en el palacio de KwaKhangelamankengane estaba el príncipe Misizulu, considerado el más que probable próximo rey.
Apareció flanqueado por un ibutho, un regimiento armado zulú, en una prueba de fuerza. Esto podría indicar que cuenta con su apoyo para suceder a su difunto padre.
Las princesas zulúes estaban cubiertas por pieles de leopardo que les colgaban de los hombros. Los príncipes lucían tabardos y una banda en la cabeza, todo ello también de piel de leopardo.