G-19 + 1: cómo la separación de EE.UU. de las políticas globales dejó huella en la cumbre del G20
La reunión de líderes de las 20 economías más grandes del mundo, el G-20, expuso la distancia que está tomando Estados Unidos y su nuevo gobierno con el resto de las naciones.
Las diferencias resultaron tan marcadas que para algunos esta cumbre se convirtió en el G-19 + 1.
La reunión celebrada en Hamburgo, Alemania, fue la primera con Donald Trump como presidente de Estados Unidos, quien defendió la política de "Estados Unidos primero" en los asuntos más importantes.
El Acuerdo de París sobre cambio climático y la postura económica fueron dos temas que mostraron las diferencias de EE.UU. con el resto de las naciones.
"La cumbre del G-20 fue un gran éxito", consideró Trump tras dejar Hamburgo.
Pero las opiniones de los líderes de dos potencias del mundo tras la cumbre fueron diferentes.
"Al final, las negociaciones climáticas reflejan la disidencia: todos en contra de Estados Unidos de América", dijo la canciller Merkel en una rueda de prensa.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, por su parte sentenció: "Nuestro mundo nunca ha estado tan dividido".
Cambio climático
Todos los países excepto Estados Unidos se comprometieron a seguir adelante con el Acuerdo de París sobre cambio climático, el cual consideraron que es "irreversible".
Donald Trump formalizó la salida de Estados Unidos de ese pacto el mes pasado, y dijo que podría regresar si se renegociaba, pero la declaración final de la cumbre del G-20 desechó la idea.
"Tomamos nota de la decisión de Estados Unidos de América de retirarse del Acuerdo de París", decía el pronunciamiento que era la voz de 19 países.
En su conferencia de prensa final, Merkel dijo que lamenta la posición del presidente Trump sobre el Acuerdo de París, pero que estaba "complacida" de que los otros 19 países descartaron una renegociación.
Trump ha dicho que está comprometido con el resurgimiento de la industria del carbón de EE.UU., la cual estaba ampliamente limitada por el Acuerdo de París firmado por el gobierno de Barack Obama.
Considera que el pacto también perjudica a los trabajadores estadounidenses.
Ante la postura estadounidense inamovible, la declaración conjunta del G-20 dijo que el país norteamericano "tratará de trabajar en estrecha colaboración con otros países para permitirles el acceso y el uso de combustibles fósiles de forma más limpia y eficiente".
El comercio
Otro punto en el que Estados Unidos no comulgó con el consenso de los otros países fue la política económica del G-20.
Los líderes de las otras naciones se comprometieron a establecer políticas que combatan el proteccionismo económico.
"No concederé nada en la dirección de quienes están presionando contra el multilateralismo", dijo el francés Emmanuel Macron, sin referirse directamente a Trump.
"Necesitamos una mejor coordinación, más coordinación. Necesitamos aquellas organizaciones que fueron creadas a partir de la Segunda Guerra Mundial. De lo contrario, estaremos retrocediendo hacia un nacionalismo estrecho de miras", añadió.
El mensaje contrastaba con la política económica del gobierno de Trump que ha dejado en claro que los intereses económicos de EE.UU. estarán por encima de los acuerdos multilaterales.
Esta postura también marcó la declaración conjunta, y por primera vez desde que hay reuniones del G-20 hubo un espacio para remarcar "el derecho de los países a proteger sus mercados".
"Las negociaciones sobre el comercio fueron extraordinariamente difíciles debido a posiciones específicas que ha tomado Estados Unidos", consideró la canciller alemana Merkel.
Duras protestas
Trump canceló su propia conferencia de prensa programada para este sábado, lo que no permitió conocer la postura final del presidente de Estados Unidos.
El mandatario se limitó a decir que la cumbre fue un "éxito maravilloso" en un mensaje de su cuenta de Twitter.
Para James Robbins, el corresponsal de la BBC en asuntos diplomáticos, esta fue una cumbre divisiva en la que el resto del mundo luchó para llegar a un acuerdo ante las nuevas políticas estadounidenses.
La cumbre se desarrolló en medio de grandes protestas en las calles de Hamburgo, las cuales fueron escenario de violentos enfrentamientos entre manifestantes y la policía.
Muchos de los manifestantes protestaban por la presencia de los presidentes Trump y Putin, exigían más compromiso en la lucha contra el cambio climático y rechazaban las desigualdades de riqueza mundial.
En algunos casos, hubo quema de vehículos, construcción de barricadas y saqueos de tiendas.
Más de 200 policías resultaron heridos y 143 personas fueron arrestadas.
Putin y Trump
El viernes, el presidente de Estados Unidos tuvo su primera reunión con el presidente ruso Vladimir Putin, un encuentro que fue muy esperado.
La supuesta interferencia rusa en la elección presidencial de Estados Unidos del año pasado era uno de los temas que generaba expectativas.
Putin dijo este sábado que cree que Trump confía en su palabra de que Moscú no interfirió en la votación, como lo han señalado investigaciones en Estados Unidos.
Dijo que tuvieron una reunión de trabajo en la que acordaron un alto el fuego en el sur de Siria, el cual fue ratificado por ambos países y Jordania.
Trump también sostuvo conversaciones al final de la cumbre con el presidente chino Xi Jinping, donde se discutieron los esfuerzos para frenar las ambiciones nucleares de Corea del Norte.
El presidente Xi sugirió que el tema continúe siendo tratado por los ministros de Defensa de ambos países, según la agencia estatal de noticias Xinhua.