Las duras críticas de líderes mundiales a Trump por suspender el financiamiento de EEUU a la OMS
El presidente estadounidense Donald Trump informó este martes que su administración suspendería temporalmente la aportación económica que le hace a la Organización Mundial de la Salud (OMS) por una supuesta "mala gestión y encubrimiento de la expansión del coronavirus".
El anuncio sorprendió a la comunidad internacional y las reacciones no se han hecho esperar.
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, fue uno de los primeros en responder a la polémica decisión asegurando que ahora "no es el momento" para cortar fondos a la OMS.
"Creo que la Organización Mundial de la Salud debe ser apoyada, ya que es absolutamente fundamental para los esfuerzos del mundo para ganar la guerra contra el covid-19", dijo en un comunicado.
"Ahora (...) no es el momento de reducir los recursos para las operaciones de la Organización Mundial de la Salud o cualquier otra organización humanitaria en la lucha contra el virus", agregó.
El mandatario estadounidense defendió su decisión argumentando que la OMS "falló en su deber básico y debe rendir cuentas".
Además, aseguró que el organismo promovió la "desinformación" de China sobre el virus, lo que habría ayudado a la propagación del brote.
Estados Unidos es el mayor donante de la OMS, que tiene su sede en Ginebra, Suiza.
En el año 2019, se estima que este país aportó cerca de US$400 millones en 2019, aproximadamente el 15% del presupuesto de la organización.
Alemania, China, Australia y Nueva Zelanda son algunos de los países que se han pronunciado en contra de la controvertida decisión.
"El virus no conoce fronteras"
El canciller de Alemania, Heiko Maas, advirtió contra "culpar a otros" por la crisis del coronavirus.
"Culpar a otros no ayuda. El virus no conoce fronteras", tuiteó Maas.
De igual forma, el alemán resaltó la necesidad de trabajar conjuntamente para combatir el covid-19 y dijo que una de las mejores inversiones es fortalecer el financiamiento de la OMS y así "desarrollar y distribuir pruebas y vacunas".
La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, dijo que no estaba de acuerdo con los argumentos dados por el presidente Trump y dijo que la OMS era un instrumento clave en la lucha contra el coronavirus.
"En un momento como este, cuando necesitamos compartir información y necesitamos consejos en los que podamos confiar, la OMS nos ha proporcionado eso", dijo.
"Continuaremos apoyándola y continuaremos haciendo nuestras contribuciones".
"Un libro de jugadas políticas"
China, por su parte, instó a Washington a continuar cumpliendo con sus obligaciones con la OMS.
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de ese país, Zhao Lijian, indicó que la pandemia se encontraba en una etapa crítica y que la decisión de Washington afectaría a todo el mundo.
Y en Australia, si bien el primer ministro Scott Morrison simpatizó con las críticas de Trump a la OMS, el dirigente también resaltó la "gran cantidad de trabajo importante" que realiza como organización y la importancia de trabajar conjuntamente con ella.
En EE.UU. las reacciones también han proliferado.
La Asociación Médica Americana, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades y el Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes son algunas de las instituciones que se han pronunciado en contra de la medida.
"El presidente nos muestra su libro de jugadas políticas: culpar a la OMS, culpar a China, culpar a sus oponentes políticos, culpar a sus predecesores, hacer lo que sea necesario para desviar el hecho de que su administración manejó mal esta crisis y ahora está costando miles de vidas estadounidenses ", denunció el representante demócrata de la Cámara, Eliot Engel.
Mientras tanto el número de contagios y de fallecidos por coronavirus sigue aumentando en Estados Unidos.
Al menos 2.200 personas murieron en ese país el martes, un número récord según la agencia de noticias Reuters.
Este miércoles, la cifra total de fallecidos llegaba a al menos 26.000; la ciudad de Nueva York es la más afectada con más de 3.700 víctimas mortales.