Asalto al Capitolio: el plan de los demócratas para votar un impeachment contra Trump
Los demócratas en el Congreso de EE.UU. tienen lista una acusación formal contra el presidente Donald Trump por el violento asalto al Capitolio el pasado 6 de enero.
Desde la Cámara de Representantes, los legisladores planean acusar al mandatario republicano de "incitación a la insurrección", indicó James Clyburn, uno de los líderes de los demócratas, a la cadena CNN.
La votación sería sometida a votación tan pronto como este martes, según Clyburn.
Sin embargo, aunque la medida avanzara en la Cámara baja, la intención de los demócratas es no enviar ningún artículo de impeachment al Senado -para abrir un juicio contra Trump- en los primeros tres meses de gobierno de Joe Biden.
"Démosle al presidente electo Biden los 100 días que necesita para poner en marcha su agenda", dijo Clyburn.
La maniobra permitiría al nuevo presidente confirmar su nuevo gabinete y poner en marcha políticas clave, incluida la lucha contra el coronavirus, algo que tendría que retrasarse si el Senado recibe antes los artículos de juicio político, pues un impeachment tiene prioridad sobre todo lo demás.
El nuevo presidente de EE.UU. hará su juramento del cargo el 20 de enero.
Por lo pronto, demócratas, y un número creciente de republicanos, acusan a Trump de alentar el motín contra el Congreso el 5 de enero, que dejó cinco personas muertas.
Hasta ahora ningún senador republicano ha manifestado apoyo a un juicio contra el presidente, pero algunos le han pedido que renuncie.
"Creo que lo mejor para nuestro país es que el presidente renuncie y se vaya lo antes posible", dijo el senador republicano Pat Toomey este domingo a la cadena NBC. "Reconozco que puede que no sea probable, pero creo que sería mejor".
Lisa Murkowski, de Alaska, fue la primera senadora republicana en instar al presidente a dejar el cargo. Ben Sasse, su colega de Nebraska, ha dicho que está abierto a valorar una acusación si la Cámara de Representantes lo aprueba.
En tanto, las autoridades han iniciado un plan de búsqueda y captura de los manifestantes que irrumpieron en el Capitolio.
La Casa Blanca ha calificado el posible juicio político como una medida "motivada políticamente" que "solo serviría para dividir aún más a nuestro gran país".
Biden dice que corresponde al Congreso decidir sobre un impeachment. Pero también señaló que durante mucho tiempo había advertido que "Trump no era apto para ocupar el cargo".
¿Un segundo impeachment?
Si el proceso continúa, Trump podría convertirse en el primer presidente en la historia de Estados Unidos en ser acusado dos veces mediante un impeachment.
Para que eso suceda, los cargos deben presentarse a la Cámara de Representantes y aprobarse en una votación.
"Puede que sea este martes o miércoles cuando se tomen medidas", dijo Clyburn a CNN. "Creo que se tomarán esta semana", afirmó.
La acusación luego se trasladaría al Senado, donde se necesita un voto de dos tercios para la destitución de un presidente. Si es declarado culpable, el Senado también podría realizar una votación para prohibir que Trump vuelva a ocupar un cargo público.
El mandatario ya fue acusado en un impeachment en 2020 que no prosperó en el Senado.
Sin embargo, Clyburn dijo que no cree que sea posible presentar cargos y llevar a cabo un juicio antes de que Trump deje el cargo dentro de 10 días.
Otra opción en la mesa era solicitar -como ya lo han hecho algunos legisladores- al vicepresidente Mike Pence que invoque la Enmienda XXV, que le permitiría convertirse en presidente interino si reúne el apoyo de otros 8 miembros del gabinete de Trump.
Pero es muy poco probable que esto ocurra, pues no hay indicios de que el vicepresidente esté dispuesto a invocar la enmienda.
Pence se ha distanciado del presidente en los últimos días y ha dicho que planea asistir a la toma de posesión de Biden el 20 de enero.
Trump, por el contrario, informó que no asistirá a la ceremonia, pese a que ya ha admitido que habrá una nueva administración y ha prometido una transferencia pacífica del poder.
Aun así, continúa señalando que las elecciones del 3 de noviembre pasado fueron fraudulentas, algo que no ha podido respaldar con pruebas.