Al Baghdadi: cómo EEUU había conseguido identificar con muestras de ADN al líder de Estado Islámico
La operación estadounidense que resultó en la muerte de Abu Bakr al Baghdadi, líder de Estado Islámico (EI) y hombre más buscado del mundo, dejó algunas preguntas en el aire.
Una de ellas es cómo las fuerzas involucradas confirmaron que el fallecido era efectivamente Al Baghdadi, quien se suicidó detonando un chaleco explosivo.
Las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), lideradas por los kurdos y aliadas de EE.UU., dicen que sus agentes tuvieron un papel vital en la ubicación e identificación del líder de EI.
Sin embargo, el presidente de EE.UU., Donald Trump, dijo el domingo que los kurdos habían proporcionado información "útil", pero que no habían desempeñado "un papel militar".
¿Qué hicieron las fuerzas kurdas?
Polat Can, asesor principal de las FDS, insistió en un hilo de Twitter publicado el lunes que sus fuerzas jugaron un papel importante en la operación.
Can detalló que las FDS habían estado trabajando con la CIA para rastrear a Al Baghdadi desde el 15 de mayo y que habían descubierto que se escondía en la provincia de Idlib, en el noroeste de Siria.
Aseguró también que una fuente kurda consiguió ropa interior de Al Baghdadi, que luego se sometió a pruebas de ADN y se usó para demostrar la identidad del líder antes de que muriera.
EE.UU. ya tenía en archivo muestras de ADN de Al Baghdadi, ya que lo habían detenido en 2004 en Fallujah, Irak.
https://twitter.com/PolatCanRojava/status/1188877009637793793
Esa misma fuente kurda, dice Can, descubrió que Al Baghdadi estaba a punto de mudarse a una nueva ubicación, en Jarabulus, en el norte de Siria.
"Toda la inteligencia y el acceso a Al Baghdadi, así como la identificación de su ubicación, fueron el resultado de nuestro propio trabajo. Nuestra fuente de inteligencia estuvo involucrada en enviar coordenadas, dirigir el descenso en paracaídas, participar y hacer que la operación fuera un éxito hasta el último minuto", señaló Can.
Durante la conferencia en la que Trump anunció la muerte de Al Baghdadi, los periodistas le preguntaron qué rol jugaron los kurdos.
"No tuvieron un papel militar en absoluto, pero nos dieron información que resultó ser útil", respondió.
Antes, el mandatario había expresado su agradecimiento "a los kurdos sirios por cierto apoyo".
Las FDS han sido aliados clave de EE.UU. en la batalla contra EI, pero, a principios de octubre, Trump retiró a las tropas estadounidenses del norte de Siria y los dejó a merced de las fuerzas turcas.
Según analistas, el retiro de EE.UU. le dio luz verde a Turquía para comenzar un asalto transfronterizo en la región contra las milicias kurdas, que controlan gran parte del noreste del país.
¿Qué sabemos sobre la operación?
Varios aliados de EE.UU. en la región recibieron una notificación previa de la operación, incluidos Turquía, Irak y Rusia, que controla el espacio aéreo sobre Idlib, y las fuerzas kurdas en el noreste de Siria.
Las tropas estadounidenses aterrizaron en medio de un aluvión de disparos en Barisha, la localidad donde supuestamente se encontraba Al Baghdadi.
Tras verse perseguido por perros de las fuerzas armadas estadounidenses, el líder de EI se escondió en un túnel sin salida, según el relato de Trump.
Los militares le pidieron que saliera y se rindiera. También hicieron agujeros en las paredes para entrar y evitar posibles trampas explosivas en las puertas.
Al verse sin escapatoria, Al Baghdadi detonó su chaleco suicida, matándose a sí mismo y a tres de sus hijos en el túnel.
Identificación inmediata
Trump dijo el domingo que los resultados de las pruebas realizadas en los restos hallados en el túnel "dieron una identificación segura, inmediata y totalmente positiva" de que era Al Baghdadi.
Las pruebas fueron realizadas inmediatamente por técnicos que acompañaron a las fuerzas especiales y que tenían muestras del ADN de Al Baghdadi con ellos.
"Tenían ADN. Más de lo que querían, incluso. Las llevaron los técnicos de laboratorio que estaban con ellos [...] Hicieron una prueba in situ", dijo Trump el domingo.
En un comunicado ese mismo día, la Casa Blanca dijo que las pruebas de ADN se habían combinado con "evidencia visual".
Según Jennifer Griffin, corresponsal de Seguridad Nacional de la cadena Fox News, las fuerzas estadounidenses combinaron las pruebas de ADN con tecnología de reconocimiento facial.
Restos al mar
Los técnicos también se llevaron del lugar "piezas sustanciales" del cuerpo de Al Baghdadi en los helicópteros.
El lunes, el jefe del Estado Mayor Conjunto de EE.UU., el general Mike Milley, dijo que los militares estadounidenses habían eliminado los restos del líder de EI.
Dijo que el entierro había terminado y que había sido manejado "apropiadamente", sin dar más detalles.
Un funcionario anónimo dijo a la agencia de noticias Reuters que Al Baghdadi había recibido ritos religiosos según la costumbre islámica y sus restos habían sido lanzados al mar.
Un proceso similar se llevó a cabo luego de la muerte del fundador de Al Qaeda, Osama bin Laden, en Pakistán en 2011.