Unas 4.000 personas han sido evacuadas debido a incendios forestales en la isla española de Gran Canaria.
Los incendios comenzaron el sábado y avanzan en dos frentes en un área montañosa de la isla.
Una decena de aviones y helicópteros, así como unos 700 bomberos, fueron desplegados en la zona.
Los esfuerzos para combatir el fuego se ven obstaculizados por las altas temperaturas, los fuertes vientos y la baja humedad, según las autoridades.
"El fuego no está contenido, ni estabilizado, ni controlado", dijo en una conferencia de prensa el presidente regional de las Islas Canarias, Ángel Víctor Torres, quien agregó que había solicitado ayuda al gobierno central español.
Los incendios, que comenzaron cerca del pueblo de Tejeda, destruyeron alrededor de 1.700 hectáreas y obligaron al cierre de 11 carreteras.
Miles de personas fueron evacuadas debido a incendios separados ocurridos en la turística isla en plena temporada alta.