Bachelet pide la repatriación de niños y de integrantes de supuestas familias del Estado Islámico
La Alta Comisionada de la ONU para los derechos humanos pidió el lunes que los miembros de las familias de yihadistas capturados o muertos en Siria e Irak sean "repatriados a menos que sean investigados por crímenes".
Michelle Bachelet, en el inicio de la 41ª sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra, hizo también un llamado a los Estados para que otorguen la nacionalidad "a los niños nacidos de sus ciudades" en las zonas de conflicto, ya que imponer el estatuto de apátrida a esos menores es un "acto de crueldad".
"Los miembros de las familias" deben "ser repatriados, a menos que sean investigados por crímenes", dijo Bachelet.
"Los niños, en particular, han sufrido graves violaciones de sus derechos, incluidos aquellos que pueden haber sido adoctrinados o reclutados (...) para cometer actos violentos. La consideración principal debe ser su rehabilitación, su protección", añadió.
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) estima que hay 29.000 niños de combatientes extranjeros en Siria, entre ellos 20.000 de Irak, indicó la Alta Comisionada, al precisar que la mayoría de ellos tenían menos de 12 años.
"Mantener en detención a personas que no son sospechosas de crímenes, en ausencia de un fundamento legal y de un control judicial independiente regular, es inaceptable", afirmó Bachelet.
"Los niños apátridas son con frecuencia privados de educación, de acceso a la atención médica y de otros elementos fundamentales de la dignidad", enfatizó.
Bachelet destacó que "algunos países han hecho esfuerzos para repatriar a algunos ciudadanos, especialmente niños" pero no detalló cuáles eran esas naciones.