AFP
Australia anunció este miércoles el cierre del controvertido centro de detención de Maribyrnong, en Melbourne, una de las muchas instalaciones usadas para encerrar a los inmigrantes indocumentados que llegan al país.
Maribyrnong se abrió a mediados del siglo pasado y en los últimos tiempos fue escenario de huelgas de hambre y otras protestas por los severos tratos dados a los internos.
En 2017, la Comisión Australiana de Derechos Humanos, un organismo gubernamental, informó que los guardias del centro usaban "medidas más restrictivas de lo necesario", como un uso excesivo de restricciones durante las escoltas.
Los pocos reclusos que quedaban fueron trasladados a otras instalaciones.
Según el ministro de Inmigración, David Coleman, las políticas exitosas redujeron la cantidad de gente retenida en los centros de detención de inmigrantes de Australia, pasando de un máximo de 10.000 personas en 2013 a algo más de 1.000 en la actualidad.
Desde septiembre de 2013 se cerraron alrededor de 19 instalaciones. El gobierno tiene la vista puesta en las elecciones de finales de mayo y el intenso debate sobre las políticas migratorias.
La coalición gobernante en Australia, liderada por el Partido Liberal, ha sido muy criticada por sus duras políticas sobre inmigración, entre las que se encuentra el uso de impopulares centros de detención en islas del Pacífico.