Las autoridades austriacas emprendieron en la noche del lunes al martes la búsqueda de uno de los autores del atentado en Viena, que ya deja al menos cuatro muertos, en un "ataque terrorista" como fue considerado el canciller Sebastian Kurz.
Uno de los atacantes, armado con un fusil de asalto y un falso cinturón de explosivos, fue abatido por la policía. Era un "simpatizante" del grupo yihadista Estado Islámico (EI), según los indicios recabados en su vivienda, precisó el gobierno.
Era un joven de 20 años nacido y criado en Viena y era conocido por la inteligencia austriaca como uno de los 90 radicales islámicos austriacos que querían viajar a Siria, tuiteó esta mañana un editor de un periódico nacional.
El atacante abatido tenía raíces albanesas y sus padres eran originarios de Macedonia del Norte, escribió el editor de Falter, Florian Kenk. La policía pensó que no era capaz de planear un ataque en Viena, agregó.
El balance de los tiroteos se eleva ya a cuatro muertos, dos hombres y dos mujeres, según los últimos datos proporcionados por la policía.
Según el ministro del Interior, Karl Nehammer, "al menos un sospechoso está huido".
Además, se confirmó que el autor habría anunciado la acción el lunes en Instagram.
Por otra parte, siete de las 17 víctimas que están siendo tratadas en el hospital se encuentran en una condición crítica y potencialmente mortal, según la agencia de noticias austriaca APA.