Atacante de vicepresidenta argentina es un "narcisista extravagante", según peritos
Fernando Sabag Montiel, detenido por el ataque fallido contra la vicepresidenta argentina Cristina Kirchner, tiene una personalidad "narcisista" y un discurso "extravagante", según un perfil criminalístico que elaboraron peritos a pedido de la fiscalía, informó este sábado la agencia estatal Télam.
"El acto fue simple. Es más simple de lo que todos creen. No me dijo nadie. No tiene tanta mística, yo estoy tranquilo ahora", dijo Sabag Montiel a peritos, según una fuente judicial citada por Télam.
“Solo quiero enamorarme”: Hombre ganó la lotería y ahora busca mujer con quien compartir su premio
Sabag Montiel, de 35 años, está procesado por "homicidio agravado en grado de tentativa", al igual que su novia, Brenda Uliarte (23) y Gabriel Carrizo (27) señalado como líder de la banda.
El fallido atentado se produjo el 1 de septiembre pasado frente al apartamento de la expresidenta en Buenos Aires, donde mezclado entre los seguidores de Kirchner, Sabag Montiel logró acercarse a ella y le gatilló una pistola calibre 32 a centímetros de su cabeza, sin que el arma se disparase.
El informe pericial consideró que Sabag Montiel tiene una personalidad "narcisista", con rasgos de "pedantería y vanidad", en tanto presenta un discurso "engorroso, extravagante y tedioso" en el que incluso se comparó con Nelson Mandela.
Sabag Montiel se negó a ser indagado y en sus declaraciones sólo se limitó a deslindar la responsabilidad de Uliarte en el ataque.
La mujer también fue sometida al estudio de personalidad, pero se mostró menos colaborativa, según las fuentes.
El tercer detenido rechazó el estudio por consejo de su defensa, según se indicó.
Las afirmaciones de los acusados para la elaboración del perfil criminalístico no tienen el valor de las vertidas en indagatoria, pero pueden utilizarse cuando el caso llegue a juicio para reconstruir la personalidad de los acusados.
Recientemente Kirchner solicitó la recusación de la jueza que sigue la causa por considerar que falló en investigar conexiones políticas del atacante.
"La justicia, ya estoy resignada, no va a investigar nada. Me quieren de acusada, no de víctima", dijo la semana pasada la expresidenta (2007-2015), sobre quien pesa un pedido de 12 años de cárcel por presunta corrupción.