El presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, designó este lunes a los científicos que encabezarán la lucha de su gobierno contra la pandemia del COVID-19, dejando claro cuál será la prioridad cuando inicie su mandato el 20 de enero.
En este sentido, uno de los asesores de este nuevo equipo, el reconocido experto en enfermedades infecciosas, Michael Osterholm, señaló al canal de televisión CNBC una dura advertencia sobre lo que viene para los próximos meses para su país: "tenemos que entender que estamos a punto de entrar en el infierno del COVID".
Osterholm, que también es director del Centro de Investigación y Políticas de Enfermedades Infecciosas de la Universidad de Minnesota dijo que el número de nuevas infecciones diarias en el país “seguirá aumentando sustancialmente”.
“Ni siquiera nos hemos acercado al ‘peak’ y, como tal, nuestros hospitales están comenzando a colapsar”, dijo Osterholm, indicando que la presión sobre los servicios de salud pronto será tan alta que la calidad de la atención que pueden brindar disminuirá.
Y agregó: “Los próximos tres o cuatro meses serán los más oscuros de la pandemia. No creo que Estados Unidos lo entienda todavía (…) Esto va a empeorar mucho. Básicamente, podemos limitar los contactos que tenemos con personas que afectarán drásticamente nuestra capacidad de contraer esta enfermedad”.
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Estados Unidos se convirtió el domingo en el primer país en superar los 10 millones de casos de COVID-19, con un promedio de 108.000 personas que ahora son diagnosticadas con la enfermedad todos los días.
Algo de alivio en medio de la pandemia se produjo este lunes cuando Pfizer anunció que los primeros datos sobre su vacuna COVID-19 mostraron una efectividad de más del 90%.
Osterholm describió el progreso como un "gran hallazgo", pero advirtió que no hay que emocionarse demasiado, y señaló que se necesitan más datos para comprender exactamente lo que significa la estadística, ya sea para prevenir enfermedades graves o simplemente síntomas más leves. “Hasta que no tengamos esa información, no podremos saber realmente qué tan revolucionario es esto”, dijo.