España reimpuso controles de covid-19 a los pasajeros procedentes de China, a quienes pedirá una prueba negativa o un certificado de vacunación, anunció este viernes la ministra de Sanidad, Carolina Darias, sin esperar a una decisión consensuada de la Unión Europea (UE).
"Vamos a implementar los controles en nuestros aeropuertos exigiendo a los pasajeros procedentes de China una prueba negativa frente al COVID o pauta completa de vacunación", anunció Darias en una conferencia de prensa.
Corea del Norte dispara un misil balístico no identificado
Darias dijo que "el principal foco de preocupación es (…) la posibilidad de que puedan aparecer nuevas variantes en China no controladas".
Los pasajeros llegados de China también deberán someterse a un control de temperatura y a un test de covid-19 en el punto de entrada a España, indicó el Ministerio en un comunicado.
Según este texto, las medidas entrarán en vigor el sábado y permanecerán vigentes hasta el 15 de febrero. El primer vuelo afectado llegará a Madrid a las 18H00 locales (17H00 GMT) del sábado.
El anuncio de Madrid se produce al día siguiente de que la agencia sanitaria de la UE, el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC), considerara "injustificado" imponer tests de covid sistemáticos a los viajeros procedentes de China.
Asimismo, una reunión informal convocada por la Comisión Europea -destinada a "un enfoque coordinado" de los Estados miembros- acabó sin ninguna decisión.
En su declaración del jueves, el ECDC afirmó que los países de la UE "tienen niveles relativamente altos de inmunización y vacunación" y "las variantes que circulan en China ya circulan" en estos países, por lo que no había necesidad de exigir pruebas negativas a nivel comunitario.
Además de España, Italia y Francia decidieron tomar medidas similares a las aplicadas ya por otros países como Estados Unidos, Corea del Sur, Israel, Japón, India y Taiwán.
"Ante la situación sanitaria de ese país, sabemos la importancia de actuar con coordinación, pero también la importancia de actuar con celeridad", se justificó Darias por no esperar a una decisión europea común.
De todos modos, España abogará porque estas medidas se implanten a nivel europeo, añadió la ministra, porque eso sería "la mejor garantía de seguridad para todos".
A pesar del aumento de casos, las autoridades chinas anunciaron que el 8 de enero pondrían fin a las cuarentenas obligatorias a la llegada a China y permitirían de nuevo a los chinos viajar al extranjero, después de tres años de aislamiento, una fecha cuya proximidad fue invocada por Darias para justificar las medidas.
Al decidir introducir controles para los pasajeros procedentes de China, el gobierno de izquierdas de Pedro Sánchez pudo estar reaccionando a la presión de la oposición conservadora, que gobierna la región de Madrid y cuya presidenta, Isabel Díaz Ayuso, pidió que se tomaran medidas inmediatas en el aeropuerto de Madrid-Barajas.
Además, el consejero regional de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, consideró "insuficiente" la medida anunciada y reclamó que todos quienes vengan de China estén obligados a presentar un certificado previo de test negativo, algo que ahora solo se exige a los no vacunados.