El alcalde de Frontera Comalapa en Chiapas, México, Oscar Ramírez Aguilar, fue amarrado por habitantes de barrios organizados después de entregar una obra de mala calidad.
Según medios locales, pobladores de 11 barrios del municipio de Frontera Comalapa se mostraron inconformes con la entrega de una construcción que no contaba con seguridad para su uso.
Los comuneros se percataron de que la entrega de un tanque de agua potable que no cumplía con la calidad requerida para su funcionamiento, por lo que se molestaron con el alcalde, exigiendo que fuera arreglado.
El alcalde fue detenido durante un recorrido entregando techos firmes y después fue llevado al lugar para que respondiera por la obra de mala calidad, donde fue atado de manos a un árbol y los ciudadanos le reclamaron por esto.
Después de unas horas de estar amarrado y acordar la revisión de la obra, los pobladores lo dejaron libre.
De acuerdo a medios locales, no es la primera ocasión en la que los vecinos de una comunidad se ponen de acuerdo para castigar a mandatarios que incumplen con sus promesas. En julio de 2020 el presidente municipal de Ixmiquilpan, Hidalgo, Pascual Charrez Pedraza, fue obligado a caminar 20 kilómetros por dejar inconclusa una obra.
También en Chiapas en octubre de 2019, un grupo de campesinos ingresó al ayuntamiento de Margaritas y amarró al alcalde Luis Escandón Hernández a una camioneta argumentando que no cumplió con sus promesas de campaña.
En dicha ocasión, la Fiscalía General del Estado de Chiapas detuvo a 11 personas después de que campesinos y policías se enfrentaran para liberar a dicho funcionario.
