Alemania: Policía investiga a diez personas por saludo nazi en marcha en Chemnitz
A los diez sospechosos, que habrían emulado el saludo con el brazo extendido de los jerarcas del Tercer Reich, se les acusa de utilizar símbolos de organizaciones anticonstitucionales, informó la Policía en un comunicado emitido este martes.
Hacer el saludo nazi está prohibido en Alemania, un país en el que la apología del nazismo o la negación del Holocausto son un delito castigado con penas que pueden ir desde una multa hasta los cinco años de cárcel.
Marcha de ultraderecha reúne a miles
Los diez investigados imitaron el saludo de Adolf Hitler en el marco de una marcha de ultraderecha en la ciudad de Chemnitz, en el este de Alemania, como reacción a la muerte de un hombre de 35 años ocurrida el fin de semana durante una pelea presuntamente con inmigrantes.
Por el momento, la Justicia alemana dictó una orden de detención contra un sirio de 23 años y contra un iraquí de 22 años, quienes presuntamente apuñalaron a la víctima tras mantener una discusión.
La víctima de la agresión es un alemán de 35 años y origen cubano, carpintero de profesión, casado y padre de un hijo, informa hoy el popular diario Bild.
Merkel condena acoso xenófobo
Más tarde, este martes, en una conferencia de prensa, la canciller alemana, Angela Merkel, subrayó que el acoso xenófobo "no tiene cabida en un Estado de derecho" como Alemania.
"Se cometió un horrible crimen, por el que fueron detenidos sus presuntos responsables", apuntó la jefa del Gobierno alemán. Los pensamientos de todos "están con los familiares de esa víctima", añadió.
Poco antes, su ministro del Interior, Horst Seehofer, ofreció enviar refuerzos policiales a Sajonia, el estado federado en el que se encuentra Chemnitz, si las autoridades regionales lo precisan.
La protesta de este lunes, la segunda que los extremistas de derecha secundaron en poco más de 24 horas en un ambiente de creciente tensión, se celebró de forma simultánea a una contramanifestación convocada por simpatizantes de izquierda. La concentración neonazi había congregado a 6.000 personas, mientras que la de signo contrario reunió a unos mil seguidores, según informó el ministro del Interior sajón, Roland Wöller.