Al menos 20 muertos en ataque en Afganistán
Se produjeron tres explosiones consecutivas de origen no identificado durante un funeral. El ataque tiene lugar cuatro días después de una de las peores explosiones en la capital afgana, junto al barrio diplomático.
Al menos 20 personas murieron y decenas resultaron heridas este sábado en tres explosiones consecutivas que se produjeron durante el funeral de un manifestante en Kabul, la capital de Afganistán. "Hasta ahora no sabemos si las explosiones fueron causadas por suicidas o por bombas colocadas con anterioridad", señaló un agente de policía.
Las detonaciones se produjeron durante el funeral de Mohammad Salem Izedyar, hijo del vicepresidente primero del Senado. Salem murió durante una protesta el viernes contra el grave atentado que se produjo el miércoles (31.05.2017), en el que murieron al menos 90 personas.
La policía disparó contra la multitud, que exigía la dimisión de algunos responsables de seguridad.
Llamado a la unidad
Entre los asistentes al funeral, se encontraban altos funcionarios del país, como el jefe del Gobierno, Abdulá Abdulá, y el ministro de Exteriores, Salahuddin Rabbani, que resultaron ilesos. Ambos informaron en las redes sociales sobre su presencia en el lugar y que no resultaron heridos. "Terroristas salvajes transformaron el funeral de nuestro hermano mártir Salem Izedyar en un campo de exterminio", escribió Rabbani.
Por su parte, el presidente de Afganistán, Ashraf Gani, dijo que el país se encuentra "bajo ataque" y llamó a la calma. "El presidente Ashraf Gani condena el atroz atentado contra los dolientes que enterraban al muerto. El país está bajo ataque, debemos ser fuertes y permanecer unidos", indicó el Palacio Presidencial en su cuenta de Twitter. El dirigente pidió a los afganos "unidad" para enfrentar los futuros desafíos, un mensaje que llega después de una semana negra en la capital afgana.
La explosión de hace unos días, una de las peores desde 2001, causó 460 heridos además de los 90 muertos, al estallar un camión de basura cargado de explosivos en la Zona Verde, el barrio diplomático y gubernamental de Kabul.