Descubren el agujero negro más grande e "imposible" que se haya visto (y no se explican su origen)
Para los científicos es una tarea constante descifrar cómo se generan los agujeros negros, además de entender cómo funcionan en el universo, ya que estas masas de materia oscura atraen con gran fuerza todo lo que orbite cerca de ellos.
Unos verdaderos monstruos del espacio, que ahora ponen nuevas pruebas para los investigadores y, más aún, para las leyes de la física actual.
Los detectores de ondas gravitacionales LIGO y VIRGO descubrieron una onda que revela al agujero negro más grande que se tenga registro, el cual fue llamado GW190521.
Un descubrimiento que tiene a la comunidad de físicos, astrofísicos y analistas espaciales sin una respuesta clara a la dimensión de un agujero negro que tiene una masa de aproximadamente 142 soles. Los científicos creen que lo más probable es que GW190521 haya sido generado por una fusión de agujeros negros binarios con propiedades inusuales.
Esta nueva e insólita fusión parece ser la más masiva hasta ahora, involucrando dos agujeros negros con masas alrededor de 85 y 66 veces la del sol, los cuales habrían colisionado entre sí generando este gigante del espacio.
El equipo de LIGO-Virgo también midió el giro de cada agujero negro involucrado, y descubrió que a medida que los agujeros negros giraban cada vez más juntos, podrían haber estado girando sobre sus propios ejes, en ángulos que no estaban alineados con el eje de su orbita.
Los giros desalineados de los agujeros negros probablemente causaron que sus órbitas se tambalearan produciendo el choque final.
Nelson Christensen, investigador del Centro Nacional Francés de Scientific Research (CNRS), comparó la señal con la primera detección de LIGO de ondas gravitacionales en 2015. "Esto es más como algo que hace 'bang', y es la señal más masiva que LIGO y Virgo han visto", indicó el científico.
Así es como GW190521 se encuentra dentro de un rango de masa intermedio entre masa estelar y supermasiva agujeros negros, siendo el primero de su tipo jamás detectado y que tiene a los especialistas tratando de encontrar respuestas de cómo dos agujeros negros se "tragaron" para formar este hallazgo.