Mientras el agujero en la capa de ozono de la Antártida se recuperaba, un nuevo orificio apareció en una zona del Ártico.
Los efectos de los químicos utilizados por el hombre, la luz solar y las temperaturas provocaron que los niveles de ozono en la atmósfera sobre el Polo Norte disminuyeran de una manera importante.
#Ozonelayer minimum 2020 in Arctic. Special met. conditions has led to stratospheric temperatures below -80°C. Thus, due to sunlight and chemistry, very low ozone values are observed. Normally the stratosphere over the Arctic is too warm and the #polarvortex too unstable. pic.twitter.com/JjGCKqP3BN
— AC SAF (@Atmospheric_SAF) March 30, 2020
De acuerdo a los estudios, el vórtice polar sobre el Ártico con aire frío formó un orificio en la capa de ozono, el más grande registrado en la historia en esa zona, aunque no del nivel del agujero de la Antártida.
Este agujero, que podría impactar gravemente en la circulación atmosférica, no es nuevo. Se registró por primera vez en 1997 y luego en 2011.
Dramatic #ozone loss (30%) over North Pole seen from space by #IASI. Exceptional meteorological conditions led to a mini "ozone hole" in March 2020. The images are averages over 1-16 March for 2009-2020. pic.twitter.com/J0VIuxb8AA
— AC SAF (@Atmospheric_SAF) March 18, 2020
Este año se ha registrado en algunas zonas una importante reducción de la capa de ozono.