Al menos 23 personas murieron este domingo por un tornado que provocó daños "catastróficos" en edificios y carreteras y cortes de electricidad en el estado de Alabama, sur de Estados Unidos, informó el sheriff local.
"Lamentablemente nuestro saldo, en relación a muertes, es de 23 en este momento", dijo a la filial local de CBS Jay Jones, sheriff del condado Lee, situado en el este de Alabama, en la frontera con Georgia, reconociendo que hay niños entre los fallecidos.
Jones había dicho antes a periodistas que varias personas están desaparecidas y otras han sido hospitalizadas, algunas con "lesiones muy graves".
Las operaciones de rescate de los desaparecidos fueron suspendidas la noche del domingo debido a condiciones climatológicas peligrosas, pero Jones indicó que se reanudarán el lunes.
"La devastación es increíble", afirmó, señalando que no recordaba una situación similar en pérdidas humanas "en al menos los últimos 50 años".
Al final del domingo, el presidente estadounidense, Donald Trump, expresó condolencias por los afectados.
"A la gran población de Alabama y las áreas colindantes: Por favor, tengan cuidado y manténganse a salvo", escribió en Twitter.
"Los tornados y las tormentas fueron realmente violentos y podrían venir más. A las familias y amigos de las víctimas, y a los heridos: ¡Qué Dios los bendiga!", añadió.