Denise Saldate, de 11 años, murió en su casa a raíz de una reacción alérgica provocada por una pasta de dientes.
Saldate había sido diagnosticada con alergia a la lactosa cuando apenas tenía un año, esto tras que sus padres constataran que no podía digerir correctamente la leche materna, los productos lácteos y los productos hechos en base a soja.
Esto motivó un cambio rotundo en el uso de productos lácteos en la vida de esta familia.
En ese sentido, sus padres, Monique y José leían atentamente las etiquetas de los productos y alimentos con los que podía relacionarse su hija.
“Le dábamos sus propios postres para que pudiera comer en las fiestitas de cumpleaños y trabajamos con su escuela para que le dieran los alimentos correctos para el almuerzo”, señaló José Saldate.
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Sin embargo, nunca imaginaron que una pasta de dientes pudiera contener leche en su composición.
Fue así como el 4 de abril, en su casa, Denise salió corriendo del baño llorando tras cepillarse los dientes. “Dijo que no podía respirar y que sus labios estaban azules”, detalló Monique Altamirano.
Esto motivó que llamaran a los servicios de emergencias, los cuales acudieron rápidamente y trataron de reanimarla.
Los padres, además, le aplicaron un autoinyector de adrenalina, para frenar la anafilaxia, el shock alérgico que era potencialmente fatal, y también trataron de darle el inhalador para el asma.
Denise, pese a los intentos, murió esa misma noche.
Luego, los padres se dieron cuenta que la pasta de dientes tenía Recaldent y una proteína de la leche; ambos componentes estaban indicados en la parte frontal del tubo pequeño de la pasta de dientes.
Sus padres, actualmente, buscan concientizar sobre la importancia de la lectura, en detalle, de cada componente de los diversos productos que usan las familias y el acceso que tienen los niños a estos.
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