Pactar, negociar, llegar a acuerdos. Con el sinónimo que más le guste al político o analista de turno, esta será una de las ideas más repetidas en los próximos días en España.
La causa de esta necesidad acuciante de "sentarse a hablar" -otro sinónimo- son los resultados de unas elecciones repetidas que algunos calificaron de "segunda vuelta", pero que no dieron el desempate anhelado.
El Partido Popular (PP), de centroderecha, volvió a ganar las elecciones en España con un 33% de los votos y 137 escaños, 14 más que el 20 de diciembre de 2015.
Le siguen el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), que con 22% de los sufragios y 85 escaños se mantiene como segundo grupo más votado.
La coalición de izquierdas Unidos Podemos se quedó en un 21% de los votos y 71 escaños, y no llegó a arrebatarle al PSOE la hegemonía en la izquierdacomo predecían las encuestas, que volvieron a fallar en sus pronósticos.
El grupo de centro Ciudadanos, otro de los nuevos partidos en la contienda política española, se quedó con un 13% de los votos y 32 escaños.
Estos son unos resultados casi calcados a los de las elecciones anteriores,pero con algunos matices relevantes: crecimiento del PP -el único grupo que aumenta sus apoyos-, mantenimiento del PSOE en segunda posición -una de las grandes sorpresas de la noche electoral -, estancamiento de Unidos Podemos y bajada de Ciudadanos.
Se puede decir que el bipartidismo continúa afectado, pero no se hundió de forma definitiva.
Y una vez más, como ya sucedió el pasado 20 de diciembre, ningún partido obtuvo mayoría suficiente para gobernar en solitario. Las dudas políticas que cubren el país desde los comicios pasados no se despejaron.
"Se repite un escenario ingobernable, con la diferencia de que el PP sale fortalecido. El PSOE resiste y Unidos Podemos decepciona, pero no se hunde, y Ciudadanos, que es el socio natural del PP, ha caído", le dice a BBC Mundo Guillermo López, profesor de Periodismo de la Universidad de Valencia y analista político.
La mayoría necesaria para formar gobierno es de 176 escaños. Las combinaciones que los otorgan son múltiples y no todas igual de sencillas desde el punto de vista de las negociaciones.
La pregunta ahora no es solo si pactar o no, sino cómo y con quién hacerlo.
BBC Mundo explora los posibles escenarios a los que se puede enfrentar España en las próximas semanas.
1- Gobierno del PP presidido por Mariano Rajoy
"Claramente, ahora Rajoy y el PP se encuentran en mejor posición que hace siete meses para conseguir investidura", señala Guillermo López.
Sin embargo, la suma de los escaños del PP y de Ciudadanos -una combinación que puede resultar lógica desde el punto de vista ideológico-, no es suficiente.
"La solución puede ser una forma diluida de gran coalición. Un pacto del PP con Ciudadanos y la abstención del PSOE. Ciudadanos podría haber pedido la cabeza de Rajoy a cambio de su apoyo si hubiera mantenido sus apoyos, pero no tiene fuerza para ello", señala López.
"Necesitan la abstención del PSOE. La cuestión es qué hará el PSOE. Si no hace nada y nos lleva a terceras elecciones o se abstiene. Eso no sería una gran coalición en sentido estricto porque no entraría en el gobierno, pero en realidad le da un gobierno al PP. El PSOE tiene una papeleta muy difícil", agrega.
Un gobierno de gran coalición a la alemana -"grosse coalition"- ha sido la opción defendida por el PP durante la campaña.
"Al PSOE se le hace más difícil porque ha negado esta gran coalición durante un año, aunque podría facilitar un gobierno del PP con una abstención en segunda vuelta", le dice a BBC Mundo el politólogo español Álvaro Madrigal.
Un sector del PSOE, en cambio, ve esta opción con desconfianza.
Mientras que el antecedente alemán -donde la conservadora CDU de Angela Merkel gobierna con el socialista SPD- garantizó la estabilidad del país, el antecedente griego, donde también se ensayó algo similar en 2012 con un pacto entre Nueva Democracia y los socialistas del PASOK, resultó en elecciones anticipadas, la victoria de Syriza y el hundimiento de los socialistas griegos hasta la sexta posición.
Quizá por eso, parte del PSOE presionará para formar otro tipo de gobierno.
2- La coalición a la portuguesa entre Unidos Podemos y PSOE
Pedro Sánchez, candidato del PSOE, aseguró en campaña que no "haría a Rajoy presidente" y desde la izquierda se presionará para que PSOE y Unidos Podemos lleguen a un acuerdo de gobierno.
"Ambos partidos deberán ceder mucho y será complicado porque no suman una mayoría. Se debería unir un partido como Ciudadanos -y ya no sería un pacto de izquierdas- o pactar con partidos nacionalistas de izquierdas", comenta Madrigal.
Y para estos grupos, la celebración de un referendo independentista en Cataluña es una cuestión decisiva para entrar o facilitar un gobierno en Madrid.
"Los nacionalistas catalanes no creo que entren en ese gobierno o se abstengan si no obtienen el referendo. Y no creo que el PSOE vaya a buscar una forma de referendo que pueda satisfacer ese requisito. Y menos después de lo que ha pasado en Reino Unido con el Brexit", apunta López.
Este sería un pacto complejo y, quizá por eso, menos probable.
3- Terceras elecciones
Pocos políticos se atreven a plantear de momento esta opción.
Durante la campaña todos los candidatos negaron esta posibilidad. Y la presión para que no suceda será enorme.
"No es descartable una repetición de elecciones. La cuestión es hasta qué punto el PSOE piensa que le perjudica más no apoyar el PP e ir a terceras elecciones en noviembre o diciembre, o que les vayan a castigar por no facilitar un gobierno. Pero veo difícil que el PSOE se decante por terceras elecciones", comenta López
Álvaro Madrigal planta una opción in extremis para intentar evitar unos terceros comicios seguidos: la reforma de la Constitución para cambiar la forma en que se nombra al presidente del gobierno.
"Esta reforma se podría hacer con un gobierno en funciones y dos quintos de la cámara. Podría incluirse una nueva cláusula que diga, por ejemplo, que ha de gobernar la lista más votada", señala Madrigal.
Si eso no sucede y, a la luz de los resultados, las negociaciones se prevén largas y complejas. También lo fueron hace seis meses y el resultado fue la repetición de comicios este 26 de junio.
Pero, ¿podría suceder? La respuesta, en breve, es "sí", legalmente es posible.