A meses de que su perro Excálibur fuera sacrificado por orden de la Comunidad de Madrid, la auxiliar de enfermería española curada de ébola, Teresa Romero y su marido Javier Limón adoptaron este sábado a una nueva mascota.
Se trata de “Alma”, un cachorro hembra American Stanford entregado por el Centro Integral de Protección Animal de Alorcón.
El diario El País informa que Romero indicó que espera que su idea de adoptar un perro "sirva de ejemplo para que estos animales puedan tener como "Alma" una familia y ser felices".
Limón, por su parte, destacó la importancia de recurrir al CIPA para que la sociedad “se conciencie y se dé cuenta de que hay muchos animales abandonados que necesitan un hogar".
Teresa Romero estuvo internada por 30 días luego de contraer el virus mientras atendía voluntariamente al misionero Manuel García Viejo en el hospital Carlos III. Ante el riesgo de que haya contraído la enfermedad, el perro "Excálibur", considerado por la pareja como “el hijo que nunca tuvo” fue sacrificado.
