El malestar y las reformas. Con la Alameda como telón de fondo, donde se veían transitando normalmente los buses del Transantiago, Boric bajó sus cartas al abordar su primer aniversario del 18-O en La Moneda. Y lo hizo con un discurso con 2 énfasis centrales, íntimamente concatenados entre sí. Por una parte, colocando énfasis en que el estallido se produjo a partir de un malestar social, que aún no está resuelto. Por otra, validó la agenda de profundas transformaciones con que llegó a La Moneda, nombrando las reformas tributaria, previsional, a la salud o la reducción de la jornada de trabajo a 40 horas semanales.
- Se trata del mismo mensaje que había entregado el día anterior y que fue valorado por el PC y el FA, que apuestan por cumplir al pie de la letra con el programa de reformas al modelo. Esta mañana, el principal artículo de El Siglo titula lo siguiente: “18/O. Está vigente la demanda de la revuelta social”.
- La palabra que más repitió en su discurso fue “reforma”.
Balance del transporte público por 18-O: funcionamiento parcial del Metro y 20% menos de usuarios
Derrota en el 4-S. La debacle electoral del Apruebo en el plebiscito del 4 de septiembre se tradujo en un fuerte golpe para agenda con que Boric llegó al poder, que se jugó todas sus fichas en la campaña para llevar adelante transformaciones radicales al modelo, rechazadas por el 62% de los chilenos. El cambio de gabinete que hizo en los días posteriores supuso un cambio en el rumbo de los primeros 6 meses de su gobierno, dejando el control político de su administración a la centroizquierda. Pero en este aniversario del 18-O el Presidente hizo solo una breve alusión al plebiscito, sin poner en tela de juicio el rumbo de sus reformas, situadas en el marco de una crisis económica, de seguridad y con una erosión inédita de su popularidad.
- “Sabemos que Chile nos pide reformas, pero no le está dando un cheque en blanco a quienes las estamos impulsando. Y las reformas que pide no siempre coinciden con las que promovemos los reformistas. El primer proceso constitucional fue, de hecho, una prueba de ello y el resultado del plebiscito así lo ha dejado claro”, dijo.
- Al llegar a La Moneda, el ministro Giorgio Jackson había dicho que parte del programa de gobierno no se podría ejecutar con la Constitución actual.
Los errores. “En esos días del Estallido se dijeron y se hicieron muchas cosas excesivas. Nos agredimos unos a otros y creo que somos muchos los que sentimos que en ese período las cosas llegaron a un extremo que no debieran haber llegado”, señaló el Presidente. En víspera de este 18-0, sin embargo, desde la oposición y sectores oficialistas hicieron llamados para que hiciera una autocrítica por la actitud complaciente con la violencia del estallido social de varios de sus ministros (todos del Frente Amplio, aunque el PC justificó la “desobediencia civil” y el propio Presidente comprometió en la campaña amnistiar a los llamados presos del estallido y a una profunda reforma en Carabineros). El domingo, Nicolás Grau y Antonia Orellana se reunieran con el general director de Carabineros tras viralizarse tuits antiguos con fuertes epítetos contra la institución. Y, tal como ha sido la línea del gobierno, no hubo autocrítica.
- En su discurso, Boric habló de errores, pero no de disculpas. “No podemos cometer los mismos errores ni quedarnos arrinconados en nuestras cómodas veredas”.
- “Como Gobierno estamos trabajando para recoger este mensaje y actuar en consistencia porque reconocemos que nuestra lectura de los cambios sociales que el país necesita estuvo muchas veces nublada por nuestras ideas preconcebidas”.
El apoyo del 18-O (y el 5 de octubre). “Hubo un período largo, que no fueron una o dos semanas, sino de meses y meses en que más del 70% de la población apoyó el Estallido Social”. La frase de Boric contrasta con algunos estudios de opinión, como el de Cadem del fin de semana: Si en octubre de 2019 un 72% señalaba que el origen del estallido social “era la expresión de un descontento social generalizado”, hoy esa cifra es de un 61%. Un 30% (+18 puntos) dice que “es un problema de orden público y de grupos violentistas organizados”.
- El Presidente puso el 18-O como una suerte de hito fundacional en el proceso de profundas reformas del país, aludiendo a advertencias de años del malestar social que existía en la población, mientras otros actores de la centroizquierda, como el senador Jaime Quintana (PPD), pusieron el foco en triunfo del NO en el plebiscito de 1988. Ni Boric ni el gobierno conmemoración el 5 de octubre, el primero de la actual administración.
Mensaje a la oposición. Boric transmitió que el país tiene la oportunidad de transformar “este tremendo quiebre en un proceso de cambios institucionales y democráticos. Eso es el proceso constitucional, esas son las reformas que tenemos en carpeta”. Mencionó a la reforma Tributaria, la Previsional, sueldo mínimo y la jornada de 40 horas laborales. Para aprobarlas, mencionó la necesidad de lograr acuerdos, construir puentes y dialogar, sugiriendo un cierto pragmatismo. “Está en la voluntad de nuestro gobierno construir esos puentes y no dinamitarlos”.
Los DDHH y Carabineros. Los asaltos y asesinatos de los últimos días han marcado que el orden público se haya transformado en la principal preocupación de los chilenos, junto con el desempeño de la economía, y para muchos la seguridad pública ha sido uno de los factores que ha determinado la erosión de la popularidad del Presidente. En ese cuadro ocurrió el homicidio del sargento Carlos Retamal, la semana pasada, y la aparición de los tuits de actuales ministros con fuertes críticas a Carabineros en el marco del estallido social. Boric navegó entre el apoyo a Carabineros y su fuerte condena a las violaciones a los DDHH, llegando a señalar que hubo abusos sexuales durante el estallido, pese a que no existen condenas por aquello. Y, en paralelo, dijo que el estallido fue un campo fértil para la expansión de “conductas violentas destructivas”, un mensaje que contrasta con la falta de una condena explícita a la violencia por parte de la izquierda durante el 18-O.
“Es el momento de actuar”. “El mandato de nuestro gobierno es poner fin a un largo momento de sequía en que las reformas no se concretan por falta transversal de acuerdo en el mundo político”. La frase fue contrastada por algunos analistas, que advirtieron durante sus primeros 6 meses en el poder, Boric y su gobierno apostaron al triunfo del Apruebo, dada la sintonía de buena parte de sus reformas con el contenido de la propuesta de la Convención. Pues bien, más allá de cualquier lectura, el Presidente dijo que hoy es el momento de actuar. El día anterior, tras el comité político, algunos dirigentes oficialistas hablaron de contrastar la inactividad de la administración Piñera con la decidida atención del gobierno de las demandas sociales, lo que para algunos constituyó un soporte conceptual para poner el foco en las demandas del estallido social y no en la autocrítica sobre la violencia.
- En la página web del gobierno, y a través de declaraciones públicas del ministros, la administración Boric ha puesto énfasis en el slogan “Chile avanzando”, lo que da cuenta de iniciativas específicas que se han implementado en sus primeros 7 meses e información sobre beneficios sociales. El PC hizo lo mismo el fin de semana a través de su portal.