Decisión vía Zoom. El miércoles pasado, tres días después del aplastante triunfo del Rechazo, un importante grupo de integrantes del grupo Amarillos por Chile sostuvieron un encuentro vía Zoom. En la reunión estaba la plana mayor del movimiento, liderado por el escritor Cristián Warnken, y tomaron la decisión de formar un partido político.
- A partir de ese momento, señalan integrantes del grupo, el ex presidente de la DC y ex presidente de la Cámara de Diputados, Gutenberg Martínez, se encuentra recolectando 100 firmas significativas antes de acudir al Servicio Electoral (Servel) para formalizar el nacimiento del partido.
- La idea es que la próxima semana se realice el anuncio, que ha sido manejado con hermetismo.
Telón de fondo. Los Amarillos, en que confluyeron las figuras de la ex Concertación que se jugaron por el Rechazo, ven en la aplastante derrota del Apruebo en el plebiscito -perdió por casi 25 puntos- un espacio político que a su juicio dejó vacío la centroizquierda, al aliarse con el FA-PC, cuyos orígenes lo situaron en demoler la transición y sus gobiernos. Más tarde apostaron por ejercer un poder hegemónico en la izquierda, como ocurrió en la Convención Constitucional.
- El primer paso del movimiento pasa por presentar candidatos para la Convención que se viene. El competir en otras elecciones populares está por verse.
- El espacio en el centro político ha sido explorado desde años y a través de distintas variantes, como ocurrió con el propio Martínez, Andrés Velasco o Mariana Aylwin, todos integrantes del grupo, a partir de los cambios en el comportamiento del electorado chileno. A ellos se suman un importante grupo de figuras del núcleo del laguismo, como Fernando Bustamente.
El mundo DC. Gutenberg Martínez y Soledad Alvear renunciaron a la Democracia Cristiana en 2018 y levantaron el movimiento Comunidad en Movimiento, meses después de la masiva fuga de militantes que supuso la salida de Mariana Aylwin y un grupo de históricos militantes DC que fundaron Progresistas con Progreso. Hoy Martínez, tal como se mencionó anteriormente, está recolectando las firmas para la constitución de Amarillos junto a Sergio Solís, laguista y vocero del grupo.
- Algunos militantes de la DC están en estado de reflexión tras los resultados del plebiscito, la pérdida de identidad que arrastra la Democracia Cristiana desde el gobierno de la Nueva Mayoría de Bachelet y su brusco desplome electoral desde los 90, cuando eran el partido más votado en Chile.
- Se trata, por ejemplo, del ex ministro Jorge Burgos, quien está evaluando seriamente la posibilidad de abandonarlo.
- Hoy, el Tribunal Supremo del partido aún sigue adelante con el proceso en contra del ex Presidente Frei Ruiz Tagle, el ex convencional Fuad Chahin y los senadores Ximena Rincón y Matías Walker por haber hecho campaña por el Rechazo. La resolución sigue pendiente, pese a la aplastante derrota del Apruebo y a que Felipe Delpin renunció a la presidencia de la colectividad días después, tras conocerse los resultados del plebiscito.
- De acuerdo a integrantes del grupo de los Amarillos, bien podrían desencadenarse otras renuncias en la DC en los próximos días. De todas formas, existen militantes que no están dispuestos aún a abandonar la colectividad, pero que adherirán al movimiento sin pertenecer a él.
- Desde las elecciones ya se han producido otros movimientos en el escenario político. El ex presidenciable radical Carlos Maldonado renunció este lunes al PR tras ser pasado al Tribunal Supremo de su partido por votar Rechazo. Maldonado, integrante de los Amarillos, dio una señal de lo que viene. “Quienes estuvimos por el Rechazo en la centroizquierda debemos ver si hay voluntad de conformar un nuevo espacio”, dijo a El Mercurio.
El ascenso de Amarillos. En febrero, a través de un documento de 2 páginas, más de 75 personalidades en Chile que incluyeron a premios nacionales, ex ministros de los gobiernos de la Concertación, rectores de universidades, académicos y parlamentarios entre otros, se unieron tras la figura de Cristián Warnken para levantar el colectivo Amarillos por Chile.
- En su manifiesto, el grupo argumentó que existen ánimos refundacionales en la entonces Convención Constitucional y se declararon como “una mayoría silenciosa del país” que quiere “reformas, no revolución, no una Constitución inarmónica o sesgada, sino una nueva Constitución equilibrada”. Se trataba de una propuesta constitucional que, según planteaban, debería alejarse de los “experimentos fallidos de otros países de América Latina” y conciliar “orden con libertad, cambio con estabilidad, como lo soñara y pensara uno de nuestros padres intelectuales de la patria, Andrés Bello”.
- Esos mismos objetivos calzan con la mirada que tienen hoy del nuevo proceso constituyente y su rápido ascenso en la política.
- Entre los suscriptores de Amarillos estuvieron los premios nacionales Sol Serrano, Iván Jaksic y José Rodríguez Elizondo, además del fundador de Educación 2020, Mario Waissbluth; el rector de la PUC de Valparaíso, Claudio Elórtegui; el ex rector de la Universidad de Chile Luis Riveros, y los escritores Carlos Franz y Mauricio Electorat.
- También se sumaron los ex ministros de Hacienda Alejandro Foxley, Andrés Velasco y Rodrigo Valdés; el expresidente del Banco Central y exministro de Economía José De Gregorio; y otros ex secretarios de Estado de los gobiernos de la Concertación, como Alejandro Ferreiro, Vivianne Blanlot, Ignacio Walker, Jorge Burgos, René Cortázar, Mariana Aylwin, Jaime Campos, Isidro Solís, Pedro García, José Joaquín Brunner y Enrique Krauss.
- La lista incluye a parlamentarios en ejercicio, como el diputado Andrés Jouannet, entre otros.
- El ascenso de Amarillos estuvo marcado por su clave en la campaña, que ensanchó las fronteras del Rechazo a la centroizquierda e incluso tuvieron un espacio en la franja televisiva, liderado por Warnken.
El dilema del nombre. Entre los integrantes del grupo no está claro si el partido se llamará Amarillos por Chile o, al formarse como partido, le otorgarán otro nombre, al tener una característica distinta al de un movimiento y apostar a su proyección en la política.