Arquitecto Yves Besançon: “Me daría vergüenza invitar a un extranjero y llevarlo al centro”
-¿Por qué cree que es una mala idea eliminar la exención al impuesto a la renta de inmuebles DFL2 en arriendo? Escribió una carta en El Mercurio sobre eso.
-Entra en vigencia en enero de 2023, viene de la administración anterior y significa que las personas propietarias perderán beneficios tributarios entre los que está que el arriendo por un departamento o casa DFL2 está exento de impuesto a la renta. Antes uno podía tener 10 o 20 DFL2 y los arrendaba y no pagaba impuesto renta. Luego se bajó a dos propiedades. Y en el segundo mandato de Piñera se eliminó.
Me parece razonable que una persona que tiene 100 departamentos DFL2 pague impuesto a la renta, porque no es alguien desvalido. Pero muchas personas, que lograron tener uno o dos departamentos, gracias a un enorme esfuerzo, van a tener un ingreso que antes no se declaraba y que ahora se va a declarar.
Creo que ese es un mal incentivo, porque si ha habido una buena ley para la construcción de viviendas en Chile fue el Decreto con Fuerza de Ley número 2 del año 1959, durante el gobierno de Jorge Alessandri, que fomentó la construcción de millones de viviendas en este país. Desde el próximo año, ya casi no hay ningún incentivo para hacer departamentos DFL2. La reforma tributaria de Mario Marcel y del Presidente Boric no toca este tema, lo mantienen tal como lo dejó el Presidente Piñera.
-Cuando se hizo el DFL2 , ¿se produjo un cambio importante en el tema de la vivienda de Chile?
-Claro, fue una verdadera revolución en cuanto a los incentivos para la construcción de viviendas con una superficie máxima de 140 metros cuadrados. El problema es grave, porque esta medida va a producir un aumento en los arriendos. Y habrá cada vez menos accesibilidad a la vivienda, porque cada vez será más caro arrendar, más caro comprar. Con el déficit que tenemos de vivienda seguir poniendo topes o zancadillas a la construcción de viviendas, es absurdo.
-¿Usted esperaba que el Gobierno revisara esta medida?
-No me parece que sea de ahí donde tiene que sacar plata un gobierno, cargándole la mano a la clase media. Las personas que tienen dos departamentos DFL2 no son súper ricos. Son personas que se han esforzado una vida entera por comprar una vivienda por la que ya pagaron todos los impuestos. Ojalá que los legisladores mediten y vean la manera de no suprimir esta exención.
-Un tema que sigue presente es la violencia y los destrozos en Santiago. ¿Cuál es su opinión como arquitecto?
-Mire, me cuesta explicar lo que siento, porque destruir lo que uno tiene es algo que francamente no lo comprendo. Sabido es que en muchos países latinoamericanos pueden haber las mismas necesidades que nosotros tenemos en Chile, y no salen a destruir a su ciudad. Hay una especie de dejar pasar las cosas sin actuar. Lo que sucede en el Instituto Nacional, que nunca se sabe quiénes son estas personas que atacan, disfrazadas con overoles blancos; o las personas que salen a romper el patrimonio que es de todos los chilenos. Es absolutamente incomprensible.
Hay que poner mano firme, para ejercer la autoridad y evitar que esos destrozos se produzcan. No puede ser que la ex Iglesia de Carabineros esté ahora llena de okupas. No comprendo que una escultura no pueda estar en el lugar orginal donde se inauguró, hecha en honor a un héroe como Baquedano, gracial al cual tenemos los territorios que nos dan riqueza, como el cobre y minerales.
Es un tema que se ha descontrolado absolutamente y yo creo que las señales deberían ser sumamente claras: respaldo a Carabineros para que actúe con la fuerza de la represión que tiene según la ley. Y garantizar que el espacio público es de todos. El espacio público no es de los vándalos ni de los vendedores ambulantes, no es para poner carpas para vivir. Hay que empezar a resolver esos problemas desde ya; eso le corresponde a la autoridad de gobierno, municipal, regional. Pero no estoy viendo que exista mucha fuerza en aplicar la ley.
-¿Le ha faltado mano firme a la alcaldesa de Santiago?
-No se trata de mano dura, tiene que aplicar la ley nada más. La verdad es que a mi me daría vergüenza invitar a un extranjero y llevarlo al centro de mi ciudad. Es un lugar que parece un campo de batalla, todo lleno de muros rayados, esculturas destruidas, el centro y los paseos peatonales parecen una feria.
-¿La gestión municipal ha sido poco decidida en este aspecto?
-La alcaldesa trabaja bien en algunas áreas con los vecinos, pero respecto del uso del espacio público, no está aplicando la ley como corresponde. Tiene que desocupar las calles de la invasión de personas que no son dueñas de las calles. Somos todos dueños de las calles.
-¿El gobierno también tiene responsabilidad?
-Por supuesto, controla la Fuerza Pública, tiene que dar señales potentes. Cuando escucho hablar a las autoridades lo dicen con claridad, pero me gustaría que actuaran con claridad. No sólo decir que no avalan estos hechos de violencia, que es algo que dice el Presidente, los ministros. También tienen que actuar y esa actuación es lo que extraño. Que hubiera una actuación dentro de la legalidad, por supuesto.
-¿Leyó el texto constitucional, decidió su voto?
-Si, lo tengo bastante claro. Pero no lo voy a decir, porque aún no termino de leerlo. Me he encontrado con artículos que quiero conversar con algunos constitucionalistas. Hay normas que no se entienden bien o quizá uno las interpreta mal. Hay una cosa clara: en Chile hace dos años y medio se instaló la voluntad de cambiar la actual constitución.
El problema es que lo que se ha redactado tiene algunos defectos, que no podemos aceptar, porque no son buenos para el país, pero al mismo tiempo, tiene muchos problemas para modificarlos. Cuando dicen “apruebe para modificarla”, yo estaría de acuerdo, pero cuando uno ve tantas dificultades para modificar la constitución propuesta por la Convención prefiero que modifiquemos la actual o que hagamos una nueva.
-¿Cómo cree que ha envejecido la torre de Costanera Center?
-La hicimos con Cesar Pelli, con un equipo de arquitectos y se cumplen 10 años de la inauguración del proyecto. Antes las postales de Santiago tenían a la Virgen del San Cristóbal, hoy tienen a nuestra torre… lo que no deja de darme pena porque soy católico. Pero es un hito de la ciudad, sin duda.