El último capítulo de “Ganar o Servir” nos dejó un momento emotivo e incluso un poco triste, con la despedida de dos personajes que en el poco tiempo que estuvieron: Nicolás Solabarrieta y Valentina Torres, más conocida como "Guarén".
Los participantes del reality quedaron sorprendidos cuando Karla Constant anunció que ambos debían abandonar el programa de forma definitiva, lo que no fue tan inesperada para ellos mismos, ya que, según revelaron, desde el inicio habían acordado con la producción que su estadía sería breve. Sin embargo, esto no hizo que la despedida fuera menos emotiva.
Fran Maira, visiblemente afectada, se despidió de su amiga Guarén con unas palabras que reflejan el vínculo profundo que habían desarrollado durante el reality. “Entró mi mejor amiga, con la que me reconcilié, y ahora te vas y me voy a sentir más sola”, expresó Fran entre lágrimas, mostrando lo mucho que esta relación significaba para ella.
El momento más emocional se dio cuando Guarén le brindó un consejo sincero a Fran, quien estaba lidiando con sentimientos de inseguridad en su relación con Austin. “No cambies y no te dejes manipular, y menos por un h… así", le dijo, refiriéndose a Austin. "No puedes estar con alguien que te potencie la inseguridad. Cuando estés con alguien que te hace sentir bien, segura, que te deja ser tú, esa es la persona”, le aconsejó Guarén, dejando claro que siempre prioriza la autenticidad y el bienestar de sus amigos.
"No puedo ser yo": Fran Maira se quiebra tras salida de Guarén en ¿Ganar o Servir?
Nicolás, por su parte, también recibió palabras de cariño y reconocimiento de parte de sus compañeros. Luis Mateucci destacó la importancia de su amistad, que se forjó en "Tierra Brava": “El Nico para mí es un amigo. Yo sé que con él puedo llegar a la final del reality. Es una persona que no suma para una persona sino para un equipo, y amigos como él hay pocos”, señaló, dejando en claro que su salida dejaría un vacío en la dinámica del grupo.
La despedida culminó con un gesto simbólico cuando Fran rompió un plato junto a Botota, como un acto final antes de que Nicolás y Guarén abandonaran la casa.
