Un caimán prehistórico que vivió en la región del Amazonas hace unos ocho millones de años tenía una mordida dos veces más poderosa que la del tiranosaurio rex.
Un equipo de paleontólogos de Brasil calculó la fuerza de la mordida del Purussaurus brasiliensis, un reptil que vivió en el Mioceno Tardío.
Según los investigadores, el animal podía ejercer una presión de hasta 11,5 toneladas, 20 veces más que la de un tiburón actual.
Fuerte y robusto
Tito Aureliano, uno de los coautores del estudio, dijo que la cabeza del animal estaba mejor estructurada para morder que el tiranosaurio.
El fuerte y robusto cráneo con los dientes cónicos fueron hechos para atrapar presas de gran tamaño.
Su cráneo estaba "mejor diseñado" que el del tiranosaurio.
El hallazgo de los académicos procedentes de varias academias fue publicado en la revista electrónica Plos One.
El Purussaurus brasiliensis podía llegar a superar 12,5 metros, más que un autobús y no tenía rival como depredador de zonas húmedas.
"El Purussaurus y el tiranosaurio vivieron en diferentes épocas pero no hay duda de que el primero le hubiera ganado una pelea", le dice a BBC Brasil Aline Ghilardi, coautora del estudio.
Descubierto en el siglo XIX
Paleontóloga de la Universidad Federal de Río de Janeiro, Ghilardi explica que el Purussaurus ya había sido descubierto en el siglo XIX.
Pero no había sido objeto de demasiada atención por parte de los científicos pese a cómo dominaban la región.
Ghilardi señala que mientras no tenía predadores naturales, el Purussaurus cayó víctima de movimientos geológicos que llevaron al surgimiento de la cordillera andina.
"El surgimiento de los Andes cambió todo para el Purussaurus, que antes se nutría de la presencia de grandes mamíferos en la región", dice.
El reptil necesitaba más de 40 kilos de carne al día, 20 veces más que los caimanes y cocodrilos de la actualidad. "Los pantanos cambiaron radicalmente y llevaron a la desaparición de numerosas especies", agrega.