Si bien los consultados concluyen que en materia “gamer” fue un buen año, de igual manera entregan los títulos que prometieron harto pero que de alguna forma terminaron defraudando.
Tomás Mosqueira, periodista de Vida Actual del diario El Mercurio; Víctor Monje, periodista de Tarreo; Gonzalo Lara, jefe de carrera de animación digital y diseño de videojuegos en la Universidad del Pacífico y Axel Christiansen, periodista de La Disquetera, conversaron con T13.cl.
1 Assasin's Creed Unity
“Esta entrega ambientada en la Revolución Francesa fue lanzada al mercado sin haber sido terminada y en sus primeras semanas resultó ‘injugable’. Muchas fallas, personajes que atravesaban murallas y un sistema en línea con muchos problemas. Lo más insólito ocurrió con su versión para Xbox que pesaba 40 gb, casi lo mismo que bajar el juego completo”, afirma Mosqueira.
“Unity resultó un juego, si bien gráficamente a la altura, plagado de errores y bugs que arruinaban la experiencia y jugabilidad. Si bien probablemente todo termine siendo arreglado a la larga con parches, la sensación con Unity es de un título desprolijo, que falló para estar a la altura de las circunstancias y expectativas”, sentencia Lara.
2 Watch dogs
“Se perfilaba como una de las grandes apuestas para el 2014. El año anterior había sido premiado como uno de los más esperados y candidato a juego del año. Es muy simple de jugar, su primera decepción ocurre con su baja en FPS; en los videos presentados en E3, el juego se veía en alta definición y todo funcionaba muy fluido, pero el resultado final fue muy distinto a esto. La historia del juego es pobre y tiene pocas cosas rescatables”, apunta el periodista de Vida Actual.
“Un concepto potente y atingente a la realidad sociopolítica con las filtraciones de Wikileaks y similares se perdió en un juego que no fue tanto que no llegó a su potencial como idea (que ocurrió) sino que además presentó una notoria regresión entre lo que se mostró en un inicio en sus etapas de desarrollo y se volvió un juego repetitivo y cliché”, complementa el jefe de carrera de animación digital y diseño de videojuegos en la Universidad del Pacífico.
3 WWE 2K15
La apuesta de la empresa de wrestling más importante del mundo generó muchas expectativas entre sus fanáticos. “Es el caso de un juego que ha tenido malas críticas en sus versiones de Next Gen y le ha ido peor en sus versiones de PS3 y 360. No llegó a la altura. El marketing fue gigante, mostrando la portada en un programa de WWE, haciendo videos exclusivos y rondas de muestra antes de los PPV”, sostiene Monje, de Tarreo.
4 Dragon Age Inquisition
“Creo que es un juego sobrevalorado, sobre todo al ser el primer juego que ganó, de manera formal, un premio como juego del año. Es lento, su sistema de pelea sigue siendo tedioso y no parece realmente como algo de nueva generación”, cuenta Christiansen.
5 Destiny
Se trata del juego más caro que se ha creado y uno de los más esperados en la historia del entretenimiento electrónico. Contó con una inversión millonaria en márketing, entre sus actores está el mismo que representa a Tyrion Lannister (Peter Dinklage) en Games of Thrones. La banda sonora contó con la producción de Paul McCartney y sus creadores eran los mismos detrás de los súper éxitos Halo y Call of Duty.
“El juego tuvo buenas ventas y ha conseguido récords por horas jugadas en línea, pero en sí este título es monótono, tiene pocas misiones para explorar y el real desafío está en cuántas horas diarias estás dispuesto a dedicarle, sin considerar que en las primeras semanas tenías que ser muy tolerante a la frustración. Personalmente, dudo que consigan su idea inicial de estar 10 años vigentes. Existían expectativas mucho mejores del resultado final y además sus servidores fueron víctima de un hackeo en septiembre”, señala Tomás Mosqueira.
6 Elder Scrolls Online
“Lo que parecía como un éxito seguro tras el arrollador éxito de SKyrim, terminó en un título que no logró ni ser un buen MMO (juego multiplayer), fallando en destacar frente a la competencia con nada que lo diferenciara rotundamente ni como un buen título dentro de la misma saga de Elder Scrolls, limitando ciertos elementos de jugabilidad que restaban al espíritu histórico de la saga”, concluye Gonzalo Lara.
7 Flappy Bird
“Fue un juego que se le dio demasiada importancia para ser una idea que se podía disfrutar como un juego flash desde hace años en diferentes formas. Si no hubiese sido por un inexplicable factor viral que hizo que se volviera popular, el juego habría pasado sin pena ni gloria”, sostiene Axel Christiansen de La Disquetera.
8 The Crew
Tomás Mosqueira: “Este juego de carreras que apostaba por algo distinto al combinar muchos géneros en uno, finalmente terminó por cumplirse el dicho "el que mucho abarca, poco aprieta". Estuvo lejos de conseguir el recibimiento que se esperaba. Monótono y con misiones muy largas. Los mismos usuarios han sido los encargados de destruir su reputación”.
“Apostó por llegar a lo más alto pero fue vapuleado por la crítica. Ubisoft no tuvo un buen año”, complementa Monje.
9 Driveclub
Mosqueira: “Otra decepción vino para PS4 con este título. El problema ocurrió con su sistema en línea, que era la apuesta y principal característica del juego; estuvo casi un mes funcionando mal, no se podía jugar contra otros usuarios, se caía constantemente la conexión y no se registraban logros. En las últimas semanas lanzaron un "gran" parche que trata de arreglar esto incluyendo climas y mejoras gráficas, e incluso van a regalar un contenido adicional, pero el daño ya está hecho”.
10 Sonic Boom
El periodista de Vida Actual de El Mercurio cierra la lista con la versión del 2014 del famoso erizo azul que cautivó en los años 90. “Hoy está a un paso de caer en el olvido; la física de los personajes fueron modificadas causando disgusto en los fanáticos, el juego no es entretenido y la reputación del ícono de Sega está en su peor momento”.
