A siete años de la "ley de empresas en un día": ¿Cómo formalizar tu empresa de forma online?
A siete años de la "ley de empresas en un día": ¿Cómo formalizar tu empresa de forma online?
Este 29 de enero se conmemoran siete años desde que la ley que simplifica el régimen de constitución, modificación, y disolución de sociedades comerciales, también conocida como "ley de empresas en un día", entró en vigencia en nuestro país.
Esta, desde el 2013, permite el registro de empresas y sociedades a través de un registro electrónico, a través del cual se instaura un "Régimen Simplificado" que permite, con mayor simplicidad y sin costo, constituir, modificar, transformar, dividir, fusionar, y disolver empresas.
Este tipo de registro es único y rige en todo el territorio de la República. Es público, gratuito, reside en el sitio electrónico www.tuempresaenundia.cl y es administrado por el Ministerio de Economía, Fomento y Turismo.
Según datos de la Asociación de Emprendedores de Chile (Asech), entre el año 2013 y 2019 se crearon 763.570 empresas en en el país. De estos 512.147 se registraron a través del portal habilitado por la ley. Por otro lado, sólo en 2019, de las 138.587 empresas, 79% a través del portal.
¿Cómo realizar el trámite de formalización en el menor tiempo posible?
Carlos Harms, abogado experto en emprendimientos, explicó a EmprendedoresT13 que existen dos sistemas para poder formalizar un negocio. Está el tradicional, que se relaciona con el papeleo típico y notarios y está el simplificado o de "Empresa en un día", mucho más ágil y completamente digital.
Según el experto, al portal se debe ingresar con una clave única, que es la misma que dan en todas las organizaciones públicas. Una vez adentro se deben llenar las cláusulas con la información correspondiente al tipo de negocio que se va a tener, como qué tipo de empresa es, cómo se va a constituir, etc.
Para Carlos, en ese momento es aconsejable hacer un "stop" y planificar antes de empezar a rellenar los campos.
"La verdad es que se llama 'en un día' pero en realidad deberían ser dos, para así pensar en, por ejemplo, qué actividad se va a desarrollar, ver los giros comerciales y también la propuesta de valor. Por ejemplo, tú me dices: 'voy a vender pan', pero eso no es suficiente. Yo diría: 'Voy a vender este tipo de pan' y así le estoy dando un valor agregado", dijo.
