Según la RAE, la empatía se define como la capacidad de identificarse con alguien y compartir sus sentimientos. Es decir, "ponerse en el lugar de otra persona".
Cuando contamos con empatía, consideramos siempre el impacto de nuestras acciones en la vida de los demás, especialmente en aquellos más vulnerables que nosotros.
¿Qué es entonces un emprendedor empático?
El principal objetivo de un emprendedor social es impactar de manera positiva la vida de los demás. Bajo este contexto, es imposible que este no se haya puesto "en los zapatos de otro" para identificar una necesidad no resuelta y luego plantear una solución viable.
De la misma forma, un emprendedor también aplica un alto nivel de empatía al tener implícito el sacrificio de la ganancia propia para el beneficio del otro, ya que con empatía es imposible estar de acuerdo con los modelos de negocios en los que se privilegia solamente la ganancia personal, incluso aunque ésta tenga un impacto negativo para otros.
Por esta razón, la oportunidad para las empresas que utilizan la empatía es tener la posibilidad de salir de los esquemas impuestos y crear sus propios modelos de negocio sostenibles en el tiempo, que vayan más allá de los números.
La empatía con el cliente
La empatía deja ver todo lo que se relaciona con un individuo y su entorno. Por eso, para un emprendedor lo más importante es identificar las necesidades de los clientes, sus impresiones, gustos, todos lo necesario para conocerlo. Esto sirve para después hacer un proceso de innovación más efectivo, apropiado y que realmente resuelva necesidades y genere experiencias.
Innovar por medio de la empatía tiene la ventaja de que los productos que se ofrecen son creados a partir de información real, cercana, de las mismas personas que utilizan o utilizarán nuestro producto. Nos da la posibilidad de crear productos cercanos, que también pueder ir más allá de resolver una necesidad, ya que son capaces de crear experiencias y generar emociones.
Empatizando con nuestros clientes, puede llevar a las empresas a crear una conexión personal con los clientes y esa misma puede ser la clave de tener una idea de negocio innovadora.
