La latente crisis social en Chile ha logrado afectar a una gran cantidad de negocios, especialmente a los emprendimientos.
Como consecuencia, muchos chilenos temen perder sus empresas en crecimiento o sus empleos, y buscan orientación para saber cómo enfrentarse a una posible quiebra.
Ante esta situación, el abogado Alberto Gerszencvich, gerente general y fundador de la empresa Remesa, especializada en gestión de cobranza, decidió compartir su visión sobre la situación actual y señaló tres fórmulas para ayudar a que estos negocios en riesgo.
No endurecer la cobranza
Según Alberto Gerszencvich, es primordial tener una buena relación con los clientes y no endurecer para nada la cobranza. Se debe ser muy flexible y dar una oportunidad a los clientes, para no romper así con la cadena de pagos.
“Entender que, si para ti es difícil pagar, para el otro también lo es, por lo que hay que ser flexible con los clientes. Debemos seguir suministrando los insumos, o servicios, lo que no significa hacer condonaciones de deudas, si no que ser más flexibles con las fórmulas y condiciones, llegando a un acuerdo para no cortar por nada la cadena de pagos", explicó el especialista.
Limpieza de cartera
Luego de entender que el otro está igualmente afectado que yo, el segundo gran paso para Gerszencvich es abocarse al negocio y comenzar a hacer ventas mejor hechas, con una limpieza de cartera, con la finalidad de mantener los márgenes.
“Muchas veces se vende por hacer flujo y no por hacer margen, pero ahora hay que dedicarse definitivamente al negocio propiamente tal. Se deben mantener entonces, aquellos clientes que nos dan margen, por sobre los que nos entregan flujo, ya que en épocas de crisis es necesario centrarse en la generación de margen para la empresa”, dijo Alberto.
Externalización de servicios
El especialista señala que en este momento de crisis es primordial centrarse cien por ciento en la empresa y no utilizar energía en servicios que pueden ser realizados por expertos externos.
“Estamos en una crisis grave y profunda y nadie tiene la receta para decir qué es lo que va a pasar, porque nadie lo sabe. La crisis nos puede llevar en poco tiempo a un desempleo de dos dígitos. Ante esto lo importante es centrarse en salvar la empresa y para eso hay servicios como el de cobranza, contabilidad, sistema de computación que quitan tiempo, restan atención al negocio y que pueden quedar en mano de aquellos que lo harán de mejor manera y de forma más efectiva. Hay que dedicarse al giro del negocio y no a otras áreas”, explicó.
