Más de 3 millones de electores fueron parte de las primarias presidenciales de los pactos Chile Vamos y Apruebo Dignidad, donde Sebastián Sichel y Gabriel Boric selllaron su participación en la primera vuelta de noviembre.
De acuerdo al último reporte del Servel, con el 99,87% de las mesas escrutadas, se registró un total de 3.137.779 electores, lo que equivale al 21,45% del total del padrón de estos comicios, cifrado en 14.627.497.
Aunque la cifra es apenas la mitad de los electores de, por ejemplo, el Plebiscito o la elección de Constituyentes, la cifra de las primarias es más comparable con la de anteriores comicios de este tipo, que convocan al electorado más "duro" de cada sector.
Si miramos los números de las anteriores primarias, la cifra es ligeramente superior a la de 2013, donde Michelle Bachelet arrasó en la centroizquierda y Pablo Longueira superó a Andrés Allamand. En esa oportunidad sufragaron 2.996.801 personas.
La cifra, además, es superior a la de las primarias de 2017, donde Chile Vamos y el Frente Amplio definieron sus cartas presidenciales. En esa oportunidad votaron 1,8 millones de electores, pero solo 327 mil en la primaria del Frente Amplio. Esta vez, su candidato, Gabriel Boric, triplicó dicha cifra, al obtener 968 mil sufragios.
En el detalle por pactos, 1.313.832 personas participaron en la primaria de Chile Vamos, mientras que en Apruebo Dignidad hicieron lo propio 1.698.085 personas.
Filas por fusión de locales
¿Qué pasa en el Liceo Lastarria? Este era uno de los comentarios que más se repetía al interior del local ubicado en la comuna de Providencia, que se caracteriza por lo expedito que suele ser el proceso en cada elección.
Pero este domingo todo era diferente: largas filas para ingresar y luego para poder emitir el sufragio eran parte del curioso panorama en el liceo que, según se comentaba, había sido fusionado con otros recintos, lo que explicaba mayor concurrencia.
Algo similar sucedía en el Liceo de Aplicación, en la comuna de Santiago, donde incluso se instaló dispositivos para mantener la distancia entre los electores.
Pero lo del Lastarria y el Liceo de Aplicación estuvieron lejos de ser casos aislados. Las filas para participar en las primarias fueron parte de la tónica de la jornada lo que, sin embargo, se atribuyó a la fusión de locales más que -necesariamente- a una mayor asistencia.
