La desconocida historia del día en que Kast renunció a la UDI
Qué observar. Hace 5 años, el 31 de mayo de 2016, en la UDI no imaginaban que el debate interno que terminó con la renuncia de José Antonio Kast al partido se reflejaría años después en una reconfiguración del sector del que aún no está claro su alcance. Menos que quien iba a liderarlo desde afuera iba a ser el propio Kast.
- Más allá de que siempre en la UDI se ha dicho que fue una salida conversada y en buenos términos, lo cierto es que el proceso fue complejo. En el partido aún recuerdan que cuando llegó a entregar la carta de renuncia al partido no estaba el entonces presidente de la colectividad Hernán Larraín. En su reemplazo lo recibió el secretario general Guillermo Ramírez.
- Ramírez estaba lejos de ser un hombre de confianza de Larraín. Se trataba de un representante de la generación de recambio del partido, que habían creído en la tesis de Kast de recuperar la identidad de la UDI, quien ahora le recibía la carta de renuncia.
- Sobre el destino de la carta física nadie tiene mayor claridad. De si Larraín la leyó o no hay diferentes versiones. Lo único claro es que conversaron días después.
Dos tesis. La renuncia de Kast al partido estuvo antecedida por una trama de sinsabores, donde tuvieron un rol un grupo de históricos dirigentes conocidos como “los coroneles”, conformado Jovino Novoa, Andrés Chadwick, Pablo Longueira y Juan Antonio Coloma. Con el grupo fundador, Kast mantuvo una relación no del todo fácil en sus últimos años de militancia, en el contexto de la disputa que se libraraba en el partido entre distintas generaciones y el futuro de la colectividad.
- Kast apostaba a una renovación de la UDI y liderar una recomposición en la derecha ante el avance de la izquierda en distintos ámbitos. Creía que el partido había perdido las ideas y convicciones con que se fundó. La colectividad tenía una numerosa bancada parlamentaria en el Congreso, pero algunos de sus liderazgos, a juicio de los partidarios del hoy candidato presidencial, no comulgaban con el corazón del proyecto que comenzó Jaime Guzmán.
- A parte de los fundadores de la colectividad, en cambio, se le atribuía la tesis de ampliar y hacer de la UDI el partido más grande del país.
- El primer traspié de Kast en este escenario dicotómico ocurrió en 2008, cuando perdió la elección interna del partido a manos del senador Juan Antonio Coloma. Lo acompañaban en este entonces figuras de la denominada generación de recambio de la UDI, como Rodrigo Álvarez o Darío Paya.
- La nueva camada de líderes, para entonces, aglutinaba a Arturo Squella, María José Hoffman, Ernesto Silva, Javier Macaya, Jaime Bellolio y la senadora Ena von Baer. Y volvió a competir en 2010. Pero Coloma volvió a imponerse.
Lo que gatilló su salida. De los factores que produjeron su salida definitiva de la UDI no hay claridad, dicen en el partido. Sí que se venían dando una serie de episodios que dejaron sin margen al republicano. Uno de ellos ocurrió en 2013, cuando intentó una carrera senatorial por Los Lagos, pero en el partido bajaron su opción en favor del actual senador Iván Moreira.
- Otro factor gatillante, piensan en la colectividad, fue la abrupta salida de Ernesto Silva de la presidencia del partido, el año 2015. La llegada de Silva a la dirección de la UDI implicaba al fin, la presencia de la generación de recambio que había empujado Kast.
La conversación con Jovino Novoa. Antes de su renuncia, y en el marco del remezón que provocó el caso Penta en el partido, Kast habló con uno de los principales líderes y fundadores de la UDI, el fallecido senador Jovino Novoa.
- En esa conversación, Kast le habría pedido que renunciara a la colectividad a partir por su vínculo con el caso Penta, según reconoció públicamente el hoy presidenciable.
- “Yo habría esperado que Jovino hubiera dado un paso al costado. Yo creo que la conversación personal con él, directa franca, habría logrado que él diera un paso al costado. Pero nadie se atreve”, dijo en una entrevista en Radio Bio Bio el 31 de mayo de 2016, tras renunciar a la UDI.
- Consultado respecto a si él le había planteado renunciar a Novoa, sostuvo: “Claro que sí. Le dije: “Jovino, tienes que tomar una decisión”. En el caso de él eso era suficiente. ¿Por qué voy a entrar a una pelea frontal cuando las cosas son obvias?”.
Su desembarco en la presidencial. Para ese entonces Kast ya tenía las maletas listas. Y entre sus cercanos ya daban vueltas a la posibilidad de que emprendiera una carrera presidencial, vinculada al ideario de la derecha tradicional.
- Para entonces, la renuncia de Kast en 2016 había generado más dudas que certezas sobre su futuro político. En el partido dicen que, días antes, se lo comunicó al sector de recambio generacional que había liderado. Entre ellos estaban María José Hoffman, Arturo Squella, Javier Macaya y Jaime Bellolio.
- Ninguno de ellos, sin embargo, se fue con él. Algunas versiones dicen que él se los impidió a algunos. Otras apuntan a que sus derrotas internas no le dieron la fuerza para empujar una salida más masiva. De este grupo solo Arturo Squella lo siguió tiempo después: hoy es uno de los hombres claves de su comando y un puente con Chile Vamos.
- Tanto en estos sectores, como en la bancada de la UDI, aseguran que en la antesala de su renuncia varios intentaron convencerlo de que lo mejor era intentar cambiar las cosas desde el partido. Pero ya no había vuelta atrás.
- Un año después Kast sorprendería a la UDI al llegar a un 8% en la elección presidencial. Ese desconcierto se tradujo más tarde en una fuerte preocupación -sobre todo cuando fundó el Partido Republicano- en un golpe por su flanco derecho.
- Parte de la colectividad, sin embargo, volvería a apoyarlo en la recta final de la campaña, bajo la convicción de que el candidato había logrado interpretar más a la derecha tradicional que Sebastián Sichel. Algunos dirigentes hicieron público su respaldo, como los senadores Claudio Alvarado y Jacqueline van Rysselbergue, además del convencional Rodrigo Álvarez, y ahora se espera que la UDI sea el primer partido en desembarcar en la campaña de Kast si pasa a segunda vuelta.