Por qué importa: Implica que el recurso para destituir a Piñera se votará antes de las elecciones del 21/11 en la Cámara y el Senado, y que la oposición consigue que entre con más fuerza en la agenda de campaña, más allá del debate sobre la gravedad de los hechos (que incluso en el oficialismo reconocen). La presentación, impulsada tras conocerse que el tercer pago de la venta de la minera Dominga que efectuó la familia de Piñera en 2010 a su amigo Carlos Alberto Délano estaba sujeta a que la zona del proyecto no se declarara de resguardo ambiental, fue apurada al extremo por los diputados de oposición para que los tiempos de trámite de la acusación cumpliesen con ese objetivo.
- Así -estiman los promotores del libelo- habrá más presión para que incluso parlamentarios de derecha se sumen a la acción, paralela a la investigación que abrió la Fiscalía contra el Presidente por presunto cohecho, soborno y delito tributario.
- No tenerlo listo hoy miércoles antes de las 9:30 horas implicaba que no se alcanzaba a dar cuenta en la sesión de hoy, y que el Senado lo revisaría después de las elecciones (en la Cámara estarían los votos cuando se pronuncien en la primera semana de noviembre, dado el respaldo DC).
- Pero en el Senado es más complejo: requiere 2/3 de los votos, por lo que es difícil que Piñera sea destituido. Son al menos 5 senadores de Chile Vamos los que necesitaría la oposición.
- La decisión de presentar la acusación también había sido más precipitada que lo usual: solo en 48 horas, pese a las dudas que había en el comando de Gabriel Boric y el FA.
La presión de los diputados y las advertencias sobre el caso Harald Beyer: El viernes pasado, el equipo de asesores -liderado por el exministro PS Gabriel de la Fuente, y el abogado de esa bancada Enrique Aldunate- advirtió que requerían más tiempo para no cometer errores (recordando el bullado caso de un copy-paste en Beyer, que de todas formas fue destituido), y que era difícil presentarlo el miércoles. Pese a ello, la jefa de bancada del FA Claudia Mix sorprendió incluso a otros diputados, afirmando este lunes, en medio del feriado, que esperaban ingresarlo el miércoles. Se activó la presión.
- En una reunión del martes AM, los asesores reiteraron a los diputados que lo responsable era tomar 3-4 días para tener un texto con argumentos jurídicos debidamente hilados y coherentes, y con los hechos respaldados por fuentes legales como documentos de actos administrativos. Estaba pendiente traducir extractos del contrato en inglés, e información pendiente de procesar.
- Se recordó el caso del recurso contra Beyer: su ingreso también fue apurado, y contenía párrafos copiados de una acusación anterior al ministro del Interior (se aludía al rol de velar por la mantención del orden público, cuando Beyer era ministro de Educación).
- Algunos diputados como Raúl Soto (PPD) y Tomás Hirsch (FA) acogieron el planteamiento, mientras otros como Gabriel Ascencio (DC) -quien intervino en la redacción- instaban a avanzar.
- Otros en la DC y PS estaban por demorarlo algunos días para que solo el golpe en la Cámara fuese antes de la elección: estimaban que dejar abierta la opción de que el Senado destituya a un Presidente justo antes de la elección podía acarrear demasiada inestabilidad política.
- A la hora de almuerzo, diputados consultaron al secretario general de la Cámara Miguel Landeros: este les dijo que los plazos corrían no desde que se presenta la acusación sino que desde que se da cuenta en Sala, por lo que si no lo presentaban hoy, ni siquiera se alcanzaba a votar en la Cámara antes de la elección (dado que la próxima semana es distrital y no hay sesión para dar cuenta).
- Entonces, se impuso la idea de presentarla ahora: demorarlo podía acarrear críticas en redes sociales -se dijo en la cita-, y perdían el vuelo comunicacional de la revelación de los Pandora Papers. Otros transmitían que daba igual, pues de todos modos el Senado lo rechazará.
El frenético trabajo con un primer capítulo a las 4 AM: Al mediodía del martes, de todos modos, a los asesores ya les había quedado claro que iban a tener que redactar a contrarreloj para el miércoles. Hasta entonces, el texto tenía un 60% de avance, afirman quienes trabajaron en él: estaban concordados los argumentos jurídicos, repartidos entre 12 abogados qué parte iba a redactar cada uno y circulaban borradores. Pero faltaba revisar fuentes y un chequeo conjunto del texto entre varios abogados -como es usual en las acusaciones-, para evitar inconsistencias entre las distintas partes y armonizarlo.
- En varios pasajes -confidencian las mismas fuentes- debieron citar finalmente información de prensa en vez de actos legales, dado el poco tiempo.
- Además, faltaron precisiones jurídicas: por ejemplo, hilar acabadamente que le imputaban a Piñera actos desformalizados en relación a Dominga (o sea, que no se le acusa de favorecer al proyecto explícitamente, sino que por la omisión de no haber declarado el resguardo ambiental).
- U otro ejemplo: la acusación se centra en sortear el inconveniente de que fueron hechos ocurridos en el gobierno anterior de Piñera (el Presidente puede ser acusado hasta 6 meses de terminado su mandato), para lo que resultaba relevante para los abogados pesquisar si existían cláusulas con efectos futuros, usuales en contratos mineros (por ejemplo, que quien vende tenga un porcentajes de utilidades futuras, o posibilidad de recomprar). Tampoco alcanzaron.
- Los asesores terminaron trabajando por turnos: a las 4 de la mañana de hoy estuvo listo el capítulo 2 (donde lo acusan de comprometer el honor de la Nación), y faltaba aún el capítulo 1 (infracciones al principio de probidad consagrado en la Constitución y las leyes).
- Solo a las 8:30 de hoy miércoles de la Fuente terminó de revisar el texto final: apenas una hora antes del plazo máximo para ingresarlo.