Más partidos y desaparecen los actuales grupos: así será el nuevo formato de la Champions League
Apenas unas horas después del histórico anuncio de doce clubes europeos sobre la creación de una Superliga privada, la UEFA respondió aprobando el lunes en un Comité Ejecutivo su reforma de la Liga de Campeones, para la etapa que comenzará después de 2024.
Esta aprobación del nuevo formato de la Champions estaba ya prevista, pero quedó eclipsada por el anuncio de que Arsenal, Manchester United, Manchester City, Chelsea, Tottenham, Liverpool, Barcelona, Real Madrid, Atlético de Madrid, Juventus, AC Milan e Inter de Milán decidieron crear una competición destinada a competir directamente con el actual gran torneo europeo.
Superliga Europea: por qué castigar a los 12 grandes clubes podría ser una mala idea
Esa Superliga europea fue calificada de "vergonzosa y egoísta" por el presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, el lunes. El esloveno destacó las virtudes de la reforma de la Liga de Campeones aprobada, que en su opinión "preserva la importancia de las competiciones domésticas", al seguir utilizando las ligas de cada país como acceso a los torneos continentales.
A partir de 2024, la Liga de Campeones pasará de 32 a 36 equipos participantes.
ℹ️ La edición 2024/25 de la UEFA Champions League tendrá un nuevo formato.
— Liga de Campeones (@LigadeCampeones) April 20, 2021
Todo lo que necesitas saber sobre los cambios ⬇️ #UCL https://t.co/pfsqmn3yuG
Dos de los cuatro cupos suplementarios se concederán teniendo en cuenta el balance histórico de los clubes, a través de su coeficiente UEFA, lo que podría permitir por ejemplo a equipos históricos o tradicionalmente fuertes poder jugar la Champions a pesar de una mala temporada.
Otros de los pasajes extra será para el país que ocupe el quinto puesto en la clasificación UEFA por campeonatos (en este momento sería Francia, que pasaría de tres a cuatro representantes) y el otro será para el campeón nacional de un país pequeño.
Cien partidos más
Sin cambios desde la temporada 2003-2004, la fase de grupos se verá radicalmente remodelada, con la desaparición de los actuales ocho grupos de cuatro equipos, que se enfrentan en dos vueltas.
En su lugar, los 36 participantes disputarán un mini-campeonato en un mismo grupo, según el “sistema suizo”: cada uno se enfrentará a un mínimo de 10 adversarios diferentes en una confrontación única, con cinco partidos en casa y cinco fuera.
Los ocho primeros en la clasificación final se clasifican para los octavos de final y los clubes clasificados del 9º al 24º lugar se disputarán las otras ocho plazas a través de duelos de ida-vuelta, comparables a unos dieciseisavos de final.
Una modificación similar del formato de la Europa League y la Europa Ligue Conference (nueva competición que arranca en la temporada 2021-2022) debe ser validado próximamente, explicó la UEFA en un comunicado.
Esta reforma, inicialmente deseada por los clubes más grandes, varios de los clubes integran ahora la Superliga europea, implica 100 partidos más en la fase de grupos en relación al formato actual.
Sobre el papel, la UEFA aspira a aumentar los ingresos por los derechos de televisión. Los participantes, que tendrán diez partidos garantizados, también aumentarán sus ingresos, incluyendo además los procedentes de la venta de entradas.
Seducir a los hinchas
En materia de interés deportivo, la multiplicación de enfrentamientos en la primera fase de la nueva Champions permitirá teóricamente más duelos entre grandes clubes antes de los octavos de final.
El formato del llamado “sistema suizo” tendrá el reto de seducir a los aficionados, poco habituados a él por el momento.
"La suma de muchos más partidos era idea de los clubes disidentes", subrayó la red de hinchas Football Supporters Europe en un comunicado. "Rechazamos aceptar una solución de compromiso elaborada para contentar a clubes ausentes", apuntó.
La UEFA también en su programa del lunes la decisión final sobre las ciudades-sede de la Eurocopa (11 junio-11 julio), pero aplazó su veredicto al viernes.
Bilbao, Múnich y Dublín podrían perder la organización de sus partidos si no garantizan la presencia de público en sus estadios.