Durante su carrera como futbolista, Eduardo Bonvallet, que este 18 de septiembre cumple siete años desde su fallecimiento, desarrolló su carrera principalmente en nuestro país vistiendo las camisetas de Universidad de Chile, O'Higgins y Universidad Católica.
Además, vistió la camiseta de Chile en dos eventos importantes: la Copa América de 1979, donde Chile fue subcampeón, tras perder la final con Paraguay y el Mundial de España 1982, donde Chile -pese a clasificar invicto y sin goles en contra- tuvo un pobre desempeño, tras perder los tres partidos que jugó.
Pero en los mejores momentos de su carrera, Bonvallet también tuvo un corto paso por el fútbol de Estados Unidos, donde jugó por dos clubes: Fort Lauderdale Strikers (foto de arriba, a la derecha) en 1980 y Tampa Bay Rowdies, en 1983.
La primera de estas aventuras es la que más se recuerda, ya que en el club del sur de Florida, Bonvallet tuvo el privilegio de compartir como compañero de equipo con figuras de talla mundial.
Uno de ellos fue Gerd Müller, campeón del mundo con Alemania en 1974, goleador del Mundial México '70. Müller fue, además, máximo artillero histórico de los mundiales hasta que fue destronado en 2006 por el brasileño Ronaldo.
Imagen donde se ve de espaldas a Bonvallet en un partido contra el Cosmos de Nueva York.
Pero Bonvallet también compartió con Teófilo Cubillas, considerado como el mejor jugador peruano de todos los tiempos, autor de 10 goles en los Mundiales de 1970 y 1978 y Campeón de América en 1975.
El mediocampista chileno jugó 16 partidos en el equipo de Fort Lauderdale, convirtiendo dos goles y entregando seis asistencias de gol a sus compañeros.
El equipo cumplió con las expectativas. En una liga con 24 equipos, los Strikers llegaron a la final del campeonato norteamericano, donde perdieron con el Cosmos de Nueva York.
Tres años después en Tampa Bay Rowdies, ya al final de su carrera, Eduardo Bonvallet jugó 11 encuentros.
Pese a los intentos de popularizar el fútbol en Estados Unidos durante las décadas de los '70 y '80 con la presencia de estas figuras y otras de la talla de Pelé -quien jugó en el Cosmos de Nueva York-, el defensa alemán Franz Beckenbauer, el holandés Johan Cruyff, el goleador italiano Giorgio Chinaglia y el propio central chileno Elías Figueroa -quien llegó en 1981 al mismo club en que estuvo Bonvallet-, la apuesta no tuvo resultado y mucho equipos de ese país terminaron desapareciendo.
De hecho, el Strikers cerró sus puertas en 1983. Sin embargo, fue refundado en 2006 en el marco de los nuevos intentos por popularizar este deporte en el país norteamericano.
Bonvallet celebrando un gol con su compañero, el jugador inglés Ray Hudson.