AFP
La identidad de los deportistas rusos que no podrán estar en los Juegos de Pyeongchang (9-25 febrero) debido al escándalo de dopaje institucional comenzó a conocerse esta semana, reavivando las llamadas a un boicot a dos semanas de la competición.
Después de la leyenda del short-track Viktor Ahn, los nombres del campeón olímpico de biatlón Anton Shipulin y de la patinadora Ksenia Stolbova, subcampeona de Europa la semana pasada, se añadieron a la lista de deportistas no seleccionables para los Juegos, lo que supuso una ducha de agua fría en Rusia.
El Comité Olímpico Internacional (COI) había advertido que su panel encargado de seleccionar a los deportistas rusos “limpios” había eliminado provisionalmente 111 nombres de una lista de 500 propuesta por las instancias olímpicas rusas para competir bajo bandera olímpica.
Esta lista negra fue presentada el lunes al Comité Olímpico Ruso (ROC) en Moscú para ser objeto de las últimas negociaciones. Y, aunque todavía no se ha hecho pública en su integralidad, sus primeras víctimas sorprenden en Rusia.
El martes el ROC reconoció que había un cierto número de "deportistas rusos de primer orden", entre ellos el patinador seis veces campeón olímpico de short-track Viktor Ahn, el campeón olímpico de biatlón Anton Shipulin y el vencedor del Tour de esquí 2017 Sergei Ustyugov.
"Estos deportistas no estaban inculpados en el marco de la comisión Oswald – que investigó el dopaje –, y nunca han estado implicado en ninguna historia de dopaje, y todas las muestras que han ofrecido durante sus carreras demuestran que son deportistas limpios", señaló el vicepresidente del ROC Stanislav Pozdniakov en un comunicado.
Añadió que estas decisiones no son "definitivas" y exigió al COI explicaciones.
Leyenda de su disciplina, y que ostenta junto al estadounidense Apollo Ohno el récord de medallas olímpicas (8), Viktor Ahn tenía que ser la estrella en Pyeongchang en la pista de short-track, deporte elevado a la categoría de religión en Corea del Sur, su país de origen – se nacionalizó ruso hace siete años –.
“Déspota y tirano”
"Si estas decisiones son finalmente tomadas, las lamentamos profundamente", reaccionó el portavoz del Kremlin Dmitri Peskov.
"Esperamos que la situación se aclare", añadió, precisando que continúan los contactos con el COI.
El presidente de la Federación de Patinaje de Velocidad Alexeï Kravtsov dijo estar "indignado por la decisión injusta del panel del COI de excluir a casi todos nuestros líderes deportivos en los Juegos", calificando al COI de "déspota y tirano".
En patinaje artístico, además de Ksenia Stolbova, Ivan Bukin (danza sobre hielo) tampoco es seleccionable, indicó la Federación Rusa, denunciando "una provocación para forzar a los deportistas rusos a renunciar a participar en los Juegos".
"Todo está hecho para que Rusia pierda la paciencia y para que quedemos por completo fuera de los Juegos", señaló el antiguo campeón de boxeo y ahora diputado Nikolay Valuev, según la agencia RIA Novosti.
La exclusión de Rusia de los Juegos de Invierno ya había provocado llamadas al boicot, opción finalmente descartada por el presidente Vladimir Putin.
Rusia está inmersa en un enorme escándalo de dopaje que provocó la exclusión de sus deportistas de los Juegos de Rio 2016 y del Mundial de atletismo de Londres 2017.
El informe del jurista canadiense Richard McLaren estableció la existencia de un sistema de dopaje institucionalizado entre 2011 y 2015, especialmente en los Juegos de Sochi 2014, al sur del país.
Además el 5 de diciembre Rusia fue suspendida de los Juegos de Invierno 2018. Los deportistas rusos “limpios” están autorizados a participar bajo bandera olímpica.
Un panel independiente del COI, dirigido por la antigua ministra francesa de Deportes Valérie Fourneyron, tiene como misión hacer la selección. Y ya ha comenzado a cobrarse sus primeras víctimas.