Roger Federer bromeó con el trofeo que le entregaron una vez consumado su regreso al número uno del tenis después de más de cinco años. "El más viejo en la historia de la ATP", se leía en el galardón.
El suizo era pura alegría después de derrotar a Robin Haase y avanzar a las semifinales de Rotterdam, triunfo que le permitió superar a Rafael Nadal de la cima.
"Alcanzar el número 1 es el máximo logro en el tenis. Cuando eres más viejo tienes que trabajar el doble, tienes que luchar para quitárselo a alguien que ha trabajado duro para estar en esa posición. Es un sueño hecho realidad", dijo tras el duelo.
"Ha sido un viaje increíble y lograrlo aquí, donde jugué con mi primera invitación en 1998, significa mucho", agregó.
Ya el jueves, después de derrotar al alemán Philipp Kohlschreiber en octavos había reconocido que no le resultó fácil volver a ubicarse en la posición en que se encuentra hoy.
"He luchado para intentar estar aquí. Tuve que ganar muchos partidos el año pasado. Nunca imaginé que esto podía pasar después de mi operación (febrero 2016)", dijo.
"FedEx" no tenía contemplado jugar este año en Rotterdam, sin embargo, se entusiasmó ante la opción de recuperar el número uno y aceptó la invitación que le hicieron.
"Lo más importante es estar sano, me habría arrepentido si no hubiera venido esta semana", aseguró.
