Por Rodrigo Eyzaguirre
Por años, por décadas, la ciudad de Cleveland arrastró como pesada mochila la de tener la peor sequía deportiva en Estados Unidos, pese a contar con equipos activos en tres ligas diferentes: los Browns en la NFL, los Indians en las Ligas Mayores del Béisbol y los Cavaliers en la NBA.
La "maldición de Cleveland" comenzó en 1964, con el título de los Browns en la NFL y no se rompió hasta este año, cuando los "Cavs" levantaron su primer trofeo en el básquetbol. En el medio, los hinchas casi pierden a su querido equipo de fútbol americano; fanáticos ebrios se pelearon en la cancha con un equipo de béisbol visitante; de la rabia quemaron asientos de un estadio, y le prendieron fuego a la camiseta 23 de LeBron cuando abandonó la ciudad por primera vez.
Las miserias de los Indians, de hecho, fueron material más que suficiente para la recordada comedia "Major League" de 1989, con Charlie Sheen, Wesley Snipes y Tom Berenger.
Pero este año, las cosas comenzaron a cambiar para Cleveland.
Los Cavaliers se quedaron con el título de la NBA este año. (Foto: AFP) |
LeBron James, luego de cuatro años en Miami, en 2014 volvió a su casa y a sus Cavaliers con una promesa: conseguir el primer título NBA para el equipo. No pudo en la primera temporada, pero este año sí (en unas dramáticas finales contra los Golden State Warriors), y de paso rompió 52 temporadas de sequía para Cleveland.
Sin los fantasmas rondando la ciudad, los Indians se sumaron a la racha positiva, ayer ganaron la Liga Americana por primera vez desde 1997 (vencieron 4-1 en la serie a los Toronto Blue Jays) y se instalaron en las Series Mundiales para intentar lograr el título del béisbol que les es esquivo desde 1948.
Donde las cosas no cambian y siguen funcionando igual de mal es con los Cleveland Browns, que luego de siete fechas de la temporada regular, son el peor equipo de la NFL.