La esquiadora alpina chilena Noelle Barahona, de 27 años, debutará esta noche –22:15 horas de nuestro país– en los Juegos Olímpicos de Invierno Pyeongchang 2018, la que será su cuarta participación consecutiva en esta cita; luego de Turín 2006, Vancouver 2010 y Sochi 2014.
Ad portas de su estreno en tierras surcoreanas, la representante nacional conversó con La Tercera y aseguró que “el orgullo más grande que podía sentir era representar a Chile en uno; en dos ya era increíble; en tres, irreal; en cuatro, nunca me lo planteé ni imaginé. Estoy muy feliz de estar en el evento más importante del deporte, sobre todo representando a un país que amo tanto”.
Sobre cómo llega a estos Juegos, Barahona comentó que “en lo físico, mental, de cuerpo y de salud, llego mejor que nunca. Si bien en estos cuatro años he tenido muchas lesiones pequeñas que han alterado mi planificación, siento que llego mucho mejor preparada, con experiencia y tranquilidad mental”.
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— Digan La Verdad 13 (@Deportes13DLV) February 10, 2018
La esquiadora también se refirió a sus objetivos en esta competencia, detallando que “son un poco abstractos. Acá, en el esquí sobre todo, es difícil decir un objetivo en cuanto a posiciones. Nos enfocamos más en objetivos técnicos, en esquiar de cierta manera. Porque si lo logramos, los resultados vienen solos. Y es un deporte donde eso es muy verdad. No tanto como el fútbol, donde hay mucha pelea, mucha garra. Esto es algo de tranquilidad mental, esquiar con conciencia. Porque la bajada dura un minuto y medio. Un error y se acaba todo. Mi objetivo es hacer lo que vengo haciendo y sé hacer”.
Finalmente reconoció que de las cinco especialidades en las que competirá –slalom gigante, slalom, súper gigante, descenso y combinada– en la que mejor se siente y con más posibilidades de lograr un buen resultado es en descenso.
“Lo bueno de esa prueba es que hago otras tres oficiales antes y eso te ayuda para ir probando la pista e ir agarrando confianza en las bajadas. Las mejores también cuentan con esa situación, pero ellas, entre sus bajadas de entrenamiento y la bajada que vale no llegan a tener tanta diferencia en confianza, porque ya la tienen. Yo puedo mejorar mucho entre la primera bajada de entrenamiento y la de la carrera, porque a mí me falta un poco de confianza”, afirmó.