Nicolás Massú recuerda de forma inédita el camino partido a partido de su hazaña en Atenas 2004
Nicolás Massú recuerda de forma inédita el camino partido a partido de su hazaña en Atenas 2004
Un testimonio inédito y exclusivo forma parte del nuevo episodio del podcast "Break Arriba", de Séptimo Game y Emisor Podcasting.
Desde Nueva York, donde se encuentra preparando la participación de su dirigido Dominic Thiem en Cincinnati y el Abierto de Estados Unidos, Nicolás Massú repasa el camino partido a partido en lo que se transformaría en el hito más relevante en la historia del deporte chileno.
Un fin de semana dorado, con la medalla junto a Fernando González en dobles, pero que para el actual coach de Copa Davis, significó un punto brillante al quedarse con el título en singles.
Gustavo Kuerte, Vincent Spadea, Igor Andreev, Carlos Moyá, Taylor Dent y Mardy Fish, formaron parte del camino del "Vampiro", quien analizó uno a uno los momentos y la forma en que iba sintiendo que la gesta estaba cada vez más cerca.
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A continuación, revisa qué recuerda Massú de cada partido:
-VS GUSTAVO KUERTEN (20°): 6-3, 5-7, 6-4
El primer partido que jugué en los Juegos Olímpicos de Atenas fue contra Guga Kuerten. Un difícil cuadro, un gran jugador. Lo conocía desde muy chico, desde la época de la Cosat. Él tiene 3 años más, nos tocó entrenar juntos. Ya habíamos jugado antes, lo conocía bien. Era difícil, mucha experiencia, número 1, estaba Top 20.
Era partido en una cancha importante, la segunda más grande. Lleno de chilenos y brasileños. Era una sensación de Copa Davis. Se definió al final, en el tercer set. Estuve muy enfocado, mucha tranquilidad, jugué a gran nivel. Me sentí muy cómodo. Me adapté rápido a las condiciones. Al principio había un poco de viento, la pelota volaba un poco, era difícil los primeros días de entrenamiento, pero una vez que empezaron los partidos me comencé a sentir muy bien.
-VS VINCENT SPADEA (23°): 7-6, 6-2
-Era un partido muy difícil. Este tipo de superficies le acomodaba. Fue en canchas laterales, había menos espacios. Él apuraba bastante, gran devolución, hacía lo que quería con el revés. Yo tenía que imponer mi ritmo, mi solidez, tratar de hacerlo largo, mandar con mi derecha, tratar de moverlo. No era fácil, él tenía mucha anticipación.
Estaba acostumbrado a jugar torneos importantes y muchas veces lo vi ganando a jugadores top en circunstancias difíciles. Manejaba muy bien la presión. Logré sacarlo adelante. Primer set lo gané 7-6, me solté y gané 6-2 Seguí sólido, marcando el ritmo e hice la diferencia.
-VS IGOR ANDREEV: (52°) 6-3, 6-7, 6-4.
-Con Andreev fue de los más difíciles. Era muy intenso, la pelota venía muy pesada, tenía una gran derecha, la pelota picaba mucho, era difícil tomarle la iniciativa, tenía mucha fuerza. Era de los jóvenes que venía entrando con mucha actitud en el circuito. Estaba cerca del 50. Fue un partidazo muy largo, fue de los más desgastantes en los JJ.OO.
Hacía mucho calor. Jugué en una cancha similar a la de Spadea. Y los dos sufrimos el calor. Los puntos eran largos, intensos. El partido duró 3 horas y media. Se definió parecido a Guga. Al final pude marcar diferencia en los momentos importantes. En momento el partido estaba para mi, para él. Me mantuve sólido. Yo estaba con confianza. Fue uno de los partidos más difíciles de la semana.
VS CARLOS MOYÁ: (4°) 6-2, 7-5
-Jugué un partidazo. Me logré recuperar bien del partido con Andreev. Aparte tenía todos los partidos de dobles entre medio, llegué con mucha chispa, confianza. Ya sentía que estaba preparado para algo importante. Venía con 3 partidos ya ganados muy buenos. Las condiciones de juego me gustaba mucho, me adapté muy bien, me gustaba jugar con Moyá. Jugábamos muy buenos partidos. Algunos los gané, otros los perdí. Pero siempre logré rendir. Teníamos un estilo de juego que nos gustaba marcar la diferencia con la derecha.
Partí muy bien, cómodo desde el principio, con mucha energía, devolviendo bien, y muy claro en el patrón de juego. Y después en el segundo set tuve oportunidades de marcar alguna diferencia, irme break arriba, después él me logró quebrar, estuve break abajo, pero quebré rápido de vuelta. Luego tuve varios match point, creo que siete, donde él jugó muy bien la mitad, en los otros yo podía haber sido más agresivo.
Son situaciones que se van dando en partidos tan cerrados. Hay mucha presión, cuartos de final de Juegos Olímpicos. Y sí, en el último match point cuando gano en la devolución me acomodo de derecha y se me corta la cuerda. Jugué todo el último punto con la cuerda rota, intenté poner en juego, buscar la posibilidad si me quedaba cómoda para tirar, era muy complicado. Busqué el momento, él me ataca, me volea, me queda cerca de mi cuerpo, y ahí me la juego y decidor tirar un passing cruzado que por suerte entro. Y termino ganando. Fue un partidazo.
VS TAYLOR DENT (28°) 7-6, 6-1
-Muy complicado. No a mucha gente le gustaba jugar con él. No te daba ritmo. Hacía saque y red. Te acaba mucho. Era difícil tener puntos largos, que era lo que a mí me gustaba. Yo en esos años estaba con una gran devolución, me era muy cómodo, me sentía muy bien. Era algo que yo trabajé muy bien desde chico. Sabía que podía contrarrestar eso con algo que era mis fortalezas. El primer set fue 7-6, muy cerrado.
Logré jugar en el tie break un par de puntos mejor. Fue parecido a lo que pasó con Spadea. Ganó el set y mantengo mi concentración y confianza y terminó ganando 6-1. Era complicado cuando tenía confianza, por algo estaba en semifinales. Creo que me ayudó mucho a recuperarme, los puntos eran muy corto. Con Moyá y Dent físicamente me empecé a recuperar un poco del desgaste del partido con Andreev. Estaba ya preparado para enfrentar la final del dobles que venía después.
VS MARDY FISH (35°) 6-3, 3-6, 2-6, 6-3, 6-4.
-La final con Fish ya lo han escuchado, han pasado los años. Se ha hablado mucho. Es la final. Llegué a la final ganando grandes partidos en singles y dobles. Venía con mucha confianza. La única preocupación era, después de la final del dobles, que terminamos muy tarde, a 5 sets, con todos los partidos de la semana, ganar la primera medalla de oro, ganar con tu amigo Fernando, compañero de toda la vida, dormí muy poco.
Cinco horas con suerte. Horario diferente, acostándote de madrugada y levantando temprano. Todos los compromisos de prensa después del dobles. El examen de anti doping que fue muy tarde. Llegar a la Villa Olímpica a recuperarse. Mentalmente estar preparado para otra batalla de 5 sets, el examen antidoping, ir a calentar al estadio y sentir que estás jugando el partido más importante de tu vida. Y que no estaba en las condiciones que uno hubiera querido o soñado en esa instancia. Era lo que me tocó, lo que había que enfrentar. Yo siempre tenía la capacidad de entender que me preparé para tener una gran oportunidad en mi vida, esa era una, no sabía si se volvía a repetir.
Tenía un respaldo de entrenamiento de toda mi vida, muchas horas, donde tenía la capacidad de dar un poco más. Estaba jugando muy bien, pero tenía que dar todo lo que tenía. Iba a pasar momentos complicados, eran 5 sets. Él venía con mucha confianza, era muy peligroso en esa superficie, y estaba entero con todas las horas que yo venía jugando en la semana. Siempre busqué algo más, no me conformé con el oro en dobles, fui en busca de eso. No tuve miedo. Encaré la situación y entré a jugar con lo que tenía. Partí 5-0 arriba, con mucha energía. Pero luego la fuerza no era la misma, se me quedaba corta la pelota, él empezó a poner más agresivo. Se me pone 5-3, logro ganar 6-3, pero ahí todo se puso difícil. Perdí el control del partido. Pasé por momentos de muchos dolores, las piernas, la reacción no era la misma. Pero siempre uno va luchando, punto a punto, pensando en un segundo aire.
Estaba capacitado y me había entrenado toda la vida para jugar hasta la última pelota del partido. La fui peleando hasta que en el 1-1 iguales del cuarto set me empecé a sentir mejor. Hubo una pelota importante que me ayudó. Era una pelota importante, donde me ponía deuce en el 1 iguales, el árbitro la corrigió, fue bastante al otro lado el servicio, esa pelota me hizo sacar un fuego interno, un tema de empezar a gritar, a alentarme, a estar más agresivo. Me vino el segundo aire y me empecé a sentir mucho mejor. Gano el cuarto set. Y ya era jugar el quinto set en los s JJ.OO.
El momento más importante de nuestras vidas. Había mucha presión. Por lo que tanto uno lucha de entrar en la historia del deporte. Fui en busca de eso. Cuando quiebro en el 2 iguales, hago un puntazo, me giro y empiezo a celebrar con todos los atletas chilenos que estaban ahí. Cuando quiebro en el quinto me sentí más cerca de la medalla. Muy contento de haber podido entregar lo mejor defendiendo a Chile. Compartir esos momentos con Fernando. El himno nacional esos dos días ahí sonando con la bandera en lo alto fue lo más bonito que me pasó en la vida como deportista. El mensaje que uno puede dejar a las nuevas generaciones, a la mia, que los chilenos si podemos ser los mejores, que se puede. El esfuerzo de mi familia, abuelo, entrenador gente cercana. Muy feliz.
