Paulo Garcés admira a “Rambo” Ramírez y vive “un sueño” en Colo Colo
El golero Paulo Garcés vive un gran momento en Colo Colo, tras alternar en la suplencia en su anterior paso por la “U” y en el mismo cuadro albo, ahora con la llegada del DT José Luis Sierra disfruta de la titularidad.
“El otro día me emocionaba solo con hablar del momento que estoy viviendo. Con mi familia y amigos más cercanos que me han visto en cosas muy malas de mi vida futbolística, ellos notan la emoción que me da decir que lo que estoy viviendo”, aseveró el golero al sitio oficial del Cacique.
Sobre el mismo tema agregó que “tengo amigos que me conocen desde niño y hoy me lo dicen: ‘Mira, estás cumpliendo tu sueño’”.
Debido este buen momento, el portero recordó sus inicios en Deportes Puerto Montt al manifestar que “ahí jugué mi primer campeonato como titular en Primera División. Lo recuerdo con mucho cariño. Ganaba como 80 lucas, era poca plata, pero lo pasé increíble”.
También apuntó a uno de los malos momentos y que vivió con la UC. Fue la eliminación a manos de Peñarol en Copa Libertadores, por un error suyo al momento de querer atrapar un balón.
“Ese partido marca un antes y un después en mi carrera. Sentía que no servía para nada, me gritaban en la calle, me apedrearon el auto. Me quería retirar”, sostuvo Garcés.
Tras estos dichos, el golero fue consultado a que jugadores admiraba en su posición y confesó que “me gustaba mucho la manera de jugar del Rambo (Marcelo Ramírez). Lo valiente, lo espectacular que era en el arco, las pelotas que te podía sacar. Hoy en día veo a Claudio (Bravo) como un líder, como un arquero sobrio, que te salva partidos y gana campeonatos. Para mí es el mejor de la historia”.
Al cierre de sus dichos, Garcés contó de su cercanía con la religión que lo lleva a asistir al Centro Cristiano Internacional con toda su familia, al que asisten otros creyentes del plantel albo, como Luis Pavez, Emiliano Vecchio, Julio Barroso, Luis Pedro Figueroa y Juan Delgado.
“¡Fe! Creo que es la palabra adecuada. La palabra que a uno lo hace trabajar el día a día y darle gracias a Dios de todo. Siento que soy un bendecido y por algo estoy hoy en día donde quiero estar”, sentenció.