Universidad Católica sumó su estrella número 13 con Beñat San José en la banca, cerrando el año como campeón. Luego de eso, el entrenador dejó su cargo por diferencias con la dirigencia de Cruzados tras pagar la cláusula de recisión.
Pero también hay un lado más amable, ya que la dirigencia entregó la medalla que certifica a los jugadores como campeones a un ex integrante del plantel. Fernando Cordero, el "Chiqui", fue invitado a San Carlos de Apoquindo para colgarse la presea dorada, ya que fue parte del plantel en el primer semestre.
Cordero partió en junio -a comienzos de la segunda rueda- hacia a Argentina, donde jugó por San Martín de Tucumán. Antes de emigrar, el volante alcanzó a jugar 7 partidos, disputando 276 minutos.
Un día especial para Fernando Cordero quien actualmente se encuentra en la búsqueda de un nuevo club ya que el elenco transandino decidió no seguir contando con sus servicios.