Un nuevo golpe recibieron este lunes los hinchas de Universidad Católica. Y es que además de la realidad de su equipo en el Torneo de Transición, donde marchan penúltimos con sólo 3 puntos, este lunes su referente Milovan Mirosevic confirmó -entre lágrimas- que se retira del fútbol, luego de 20 años de actividad.
El anuncio lo hizo esta jornada en el estadio San Carlos de Apoquindo tras la práctica del primer equipo, donde el volante -que entrenó diferenciado- le contó a sus compañeros la noticia de que ya no va más en el balompié profesional.
.@MiloMirosevic: "Pensando en el futuro quiero comunicar que dejaré de ser futbolista profesional" pic.twitter.com/PfTBNxU5Y2
— Universidad Católica (@CruzadosSADP) 21 de agosto de 2017
La causa de la determinación son los problemas en su rodilla que nunca dejaron de aquejarlo. De hecho, en el último tiempo recrudeció y el diagnóstico es una lesión no operable, por lo que no estará jamás en óptimas condiciones.
El último ídolo cruzado
Con Católica logró levantar 3 títulos nacionales, siendo quizás el más recordado el del año 2010 en su segundo paso por el club, cuando la franja logró ser el campeón anual con el “Milo” como goleador con 19 tantos, ganando al año siguiente la Copa Chile.
Luego emigró a Estados Unidos para regresar en el año 2013, antes que en el 2014 tuviera una polémica salida hacia Unión Española durante el periodo en que Rodrigo Astudillo conducía interinamente al club y con Luis Larraín recién llegado a la testera de Cruzados SADP, quienes decidieron no renovar su contrato.
Sin embargo, y tras convertirle al cuadro de sus amores mientras vestía la camiseta roja de los hispanos, volvió a mediados del 2016 para conquistar el histórico bicampeonato de Universidad Católica de la mano de Mario Salas, en el Apertura 2016-2017.
La carrera de Mirosevic
Tras brillar en el Sudamericano Sub 17 que clasificó a Chile al Mundial de Egipto, hizo su debut profesional en el recordado clásico de 1997 ante Colo Colo que se jugó con juveniles, en la primera visita de los albos a San Carlos.
De ahí comenzó una carrera que lo llevó a ganar la medalla de bronce con la selección en los Juegos Olímpicos de Sídney 2000 y a dar el posterior salto al combinado absoluto.
Quizás su partido más recordado con el cuadro nacional fue el 2-2 que rescató “La Roja” de Juvenal Olmos ante la Argentina de Marcelo Bielsa en Buenos Aires, donde el “Milo” marcó el primer descuento de Chile y cumplió un gran cometido.
Además, paseó su talento por el país trasandino jugando en Racing Club de Avellaneda (2003-2006) y Argentinos Juniors (2008-2009), registrando también una aventura por el Beitar Jerusalén de Israel (2006-2008) y por el Columbus Crew de la MLS (2012).
