Contraloría ratifica graves irregularidades en remodelación de Estadio Ester Roa
La Contraloría General emitió el informe final de la investigación especial en torno a la remodelación del Estadio Ester Roa Rebolledo de Concepción, sede de la Copa América el año pasado en nuestro país, estableciendo graves irregularidades en el proceso de licitación realizado por el Municipio en 2014, hecho que fue denunciado en octubre ese mismo año.
El órgano contralor ratificó que hubo un sobreprecio de 4.660 millones de pesos. Mientras en la tensoestructura hubo $1.692.512.642 de pago en exceso, en las butacas hubo $2.223.466.449. Con esto se ratifica lo denunciado el mismo día en que se aprobó la licitación propuesta por el alcalde Álvaro Ortiz al Concejo Municipal.
La Contraloría también estableció que la obra se licitó y se adjudicó sin la disponibilidad presupuestaria requerida, existiendo constancia de que el Instituto Nacional de Deporte (IND) comprometió la transferencia de los $14.838 millones faltantes, más de dos meses después de que la obra había sido adjudicada.
Frente a estos dos puntos, dado los graves incumplimientos, la Contraloría estableció que las propuestas – económica y técnica – debieron rechazarse por no respetar las bases de la licitación, recalcando que el Municipio y sus autoridades no velaron por una correcta administración de los recursos públicos.
Destacar que en cuanto a la propuesta técnica, los oferentes de la segunda licitación – Serinco Limitada y Claro Vicuña (que finalmente se la adjudicó) – no presentaron la documentación requerida o no se apegó a los requerimientos técnicos previstos. Esto obligaba al Municipio a "rechazar ambas ofertas", según informó Contraloría.
En el plano económico, las empresas tampoco expusieron el detalle de los costos y no incluyeron aparte los gastos generales desglosados, imprevistos y utilidades. Es decir, el Municipio aceptó una oferta que no contenía toda la documentación requerida.
Por todo esto y por otras graves anomalías e infracciones a las leyes, la Contraloría llevará a cabo un sumario que determine las responsabilidades de los funcionarios y autoridades involucradas.
La "teleserie" de la remodelación
El Estadio Ester Roa Rebolledo recién pudo debutar en la segunda ronda de la Copa América Chile 2015. |
La remodelación del Estadio Ester Roa Rebolledo se transformó en un verdadero dolor de cabeza antes de la Copa América. Incluso debió retirarse como sede durante la primera ronda del certamen, siendo el Estadio Monumental el recinto que cubrió sus inconvenientes.
Los problemas comenzaron luego de que la empresa Copasa se adjudicara la licitación de la remodelación del estadio para que cumpliera con los estándares FIFA de cara a la copa. El monto era superior a los 12 mil millones y el plazo de ejecución era de 14 meses.
Sin embargo, se puso fin al contrato por el retraso de las obras. En agosto de 2014 se esperaba un avance del 60%, pero sólo se llegó a un 25%.
Una nueva licitación fue adjudicada por Claro y Vicuña, por 30 mil millones y un plazo de 210 días. Nuevamente hubo demoras, esta vez por paralizaciones de los trabajadores que exigían mejores condiciones laborales.
Los concejales Alejandra Smith (DC) y Joaquín Eguiluz (RN), junto al ex concejal Jorge Condeza, acudieron en reiteradas ocasiones a la Contraloría para denunciar las irregularidades. Incluso planteaban un sobreprecio de $1.600 millones, bastante inferior a lo que determinó el órgano contralor.
Uno de los puntos más cuestionados en la construcción del estadio es la instalación de las butacas. En una de las licitaciones que fue declarada desierta, se presentó una cotización de $ 500 millones por los asientos del recinto. Sin embargo, la empresa constructora facturó $ 3.100 millones por este ítem. Es decir, cada butaca costó $ 100.000 en vez de $ 15.000