El volante español de 34 años Andrés Iniesta, quien desde este 2018 juega en el Vissel Kobe de Japón, no acostumbra a hablar de su vida privada. Sin embargo, en una entrevista con Planeta Calleja mostró su lado más íntimo, contando incluso cómo conquistó a su mujer Anna Ortiz en 2007.
El ex FC Barcelona contó que fue a un bar junto a un amigo en Mataró –en la costa de la provincia de Barcelona– y que, por casualidad, ella estaba trabajando de camarera en ese lugar. “Yo le eché el ojo y fue un flechazo mortal”, reconoce el futbolista.
Aunque Iniesta no tomó la iniciativa en aquel momento, esa noche comenzó “un trabajo exhaustivo” para conquistarla. A través de su amigo consiguió el número de teléfono y a los pocos días se animó a escribirle. A ella le hizo ilusión, pero en ese momento tenía pareja, así que no alimentó las esperanzas del campeón del mundo en Sudáfrica 2010.
[VIDEO] La espectacular asistencia de Andrés Iniesta que volvió locos a los hinchas en Japón
¡No te retires nunca, Andrés! Iniesta realizó una asistencia brillante para el gol de Podolski en el triunfo 2-1 del Vissel Kobe en Japón. ¿Cómo vio ese pase? pic.twitter.com/zNAZ8kzDNE
— SportsCenter (@SC_ESPN) 3 de noviembre de 2018
“Me hizo sufrir porque no me daba bola”, contó el jugador, mientras ella explicó que no le hizo caso porque “respetaba lo que tenía”.
Fue ahí donde Iniesta reconoció que durante meses utilizó algunas “artimañas” para enamorarla. “Lo mío fue un flechazo, pero ella se fue enamorando... y eso tiene un proceso”, dijo.
Hasta que un día ella se dio cuenta que estaba enamorada de Iniesta. “Fue al volver de una gira con el Barça de Japón. Me trajo unos aviones, porque aquí los aviones se llaman Ana (como su nombre), y me escribió una carta”, contó Ortiz.
Habían quedado a la entrada de Mataró en una gasolinera. “Y se tiró dos horas de caravana para venir, darme eso e irse. Y en ese momento, después de haber estado dudando si ir o no ir, llegué a casa y le dije a mi hermana: me he enamorado”, reconoció la mujer del futbolista.
Hoy Iniesta y Ortiz viven junto a sus tres hijos en Japón, mismo país del cual él regresó cuando nació el amor. “El destino era Japón”, concluyó el volante.
