James Corden es un loquillo y su última víctima fue el ex futbolista inglés David Beckham.
Corden es conductor de televisión y se ha hecho famoso en el último tiempo por segmentos como Carpool Karaoke -donde comparte un auto con famosos de todo tipo- o sus bromas, como la que le hizo a Becks al simular que le presentaban una nueva estatua en su honor.
El montaje era el siguiente: En el Dignity Health Sports Park —complejo deportivo del LA Galaxy— el inglés participaría en el descubrimiento de una estatua en su honor. En un ambiente de completa sobriedad, el deportista quedó perplejo ante la mala factura de la escultura.
La reacción del "23" (que puedes ver desde el 05:00 en el video) es elocuente. En algún punto del registro, el astro señala claramente: "No hay manera de que eso vaya en frente del estadio".
El mismo Corden, en tanto, contó que la broma se le ocurrió cuando leyó en algún lugar que David no había visto la versión final de una estatua que el club prepara para él.
Sobre esa escultura no hemos tenido novedades, pero Corden planteó que "pensé que sería divertido cambiar la estatua real con una que hicimos un poco menos halagadora".
Para el éxito de la jugarreta contó con el apoyo del presidente y ex jugador de LA Galaxy, Chris Klein.
