El fútbol inglés fue protagonista de un violento episodio durante la previa del duelo entre Swansea y Derby County –el pasado 1 de mayo en el Liberty Stadium por la 38ª fecha de la Football League Championship, o Segunda División de Inglaterra– cuando un fanático del equipo visitante intentó ingresar borracho al recinto deportivo.
Edward Dylan Price, hincha de los “Carneros” de Frank Lampard –que el lunes juegan el ascenso frente a Aston Villa tras dejar en el camino al Leeds United de Marcelo Bielsa– no pudo acceder al Liberty Stadium después de que el personal de seguridad que estaba en la entrada le impidiera el paso por su evidente estado de ebriedad.
Tras la negativa el barrista golpeó fuertemente en la cabeza a una mujer encargada de seguridad, agresión que fue captada por una cámara. Luego de eso el sujeto fue capturado por la Policía y trasladado a la cárcel, donde se inició un sumario que terminó con varios castigos.
Ante el Tribunal de Magistrados de Swansea, Prince se declaró culpable de golpear en la cara a la asistente Iona James. “Le dijo a la Policía durante la entrevista que es un idiota cuando está borracho”, señaló en la corte la fiscal Julie Sullivan.
“Había estado bebiendo desde las 2 de la tarde y el incidente ocurrió alrededor de las 8 de la tarde. Llegó a Swansea y fue a un pub cerca del Liberty Stadium, emocionado porque Derby jugaba contra Swansea (…) Había ido a buscar su boleto, luego regresó al pub y bebió más alcohol”, continuó el relato.
Frente a esto, el tribunal de la ciudad tomó duras sanciones contra el aficionado. Primero fue sentenciado a cumplir una orden comunitaria de 12 meses. Además tendrá que ir a un centro de tratamiento para alcohólicos por nueve meses y recibió una multa de 63 dólares, misma cantidad de dinero que deberá pagarle a la víctima, quien podrá iniciarle una demanda paralela.
Por último, se le prohibió el ingreso a partidos dentro de Inglaterra o Gales por un periodo de tres años.
El diario británico Mirror publicó el video de la agresión, imágenes que pueden resultar sensibles por su contenido violento.