El pasado jueves 25 de julio se viralizó un video en el que dos jugadores del Arsenal, Mesut Özil y Sead Kolasinac, eran asaltados por dos hombres que intentaron robarles la camioneta perteneciente al volante alemán.
Las imágenes tenían un toque de heroísmo, ya que el lateral que representa a Bosnia y Herzegovina enfrentó a los asaltantes a golpe limpio, mientras su compañero arrancaba hacia un restaurante cercano y los antisociales arrancaban.
Lo que Özil y Kolasinac no sabían era que este hecho delictual les seguiría trayendo problemas varias semanas después.
De acuerdo a The Sun, las estrellas del Arsenal no han podido debutar esta temporada con su equipo al estar en medio de una guerra de pandillas que se inició posterior al asalto.
El club aduce "motivos de seguridad".
La banda que perpetuó el hecho tiene sede en Londres y buscaba robar los relojes de lujo de los futbolistas. Sin embargo, se encontraron con que sus rivales, una banda de Europa del Este, se comprometió a evitar más ataques.
Ante esta provocación, la pandilla londinense amenazó de muerte a los jugadores y a sus parejas, por lo que se encuentran con efectivos de seguridad durante las 24 horas del día.
De hecho, Özil contrató perros guardianes y la novia de Kolasinac volvió a Alemania prometiendo no volver nunca más a Inglaterra.
Mientras tanto, dos hombres llamados Ferhat Ercan y Salaman Ekinci, ambos de 27 años, fueron detenidos el pasado jueves merodeando en la casa del volante alemán.